VIOLENCIA NO CESA EN IRAK

Un kamikaze ha perpetrado un atentado contra una mezquita chiíta en Bagdad cobrándose la vida de al menos 10 personas y causando heridas a otras 15. Hoy es el día de oración para los musulmanes. El pasado mes de abril otro ataque terrorista en este mismo templo causó la muerte de 90 personas. El ataque se produjo sobre las 12.15 (hora local), después de la oración del mediodía del viernes, la más importante para los musulmanes, en la mezquita de Al Burasa, en el barrio de Utaifiya.En el momento del atentado los fieles se disponían a prepararse para la siguiente oración, tres cuartos de hora más tarde. El número de víctimas podría aumentar debido a la gravedad de varios de los heridos, que fueron trasladados al Hospital de Al Karj, cercano al lugar del suceso. El atentado, cuyas circunstancias exactas no se conocen aún con precisión, ha sido cometido el tercer día de vigor del plan de seguridad en el que participan 50.000 soldados y policías iraquíes y militares de la fuerza multinacional. El pasado 7 de abril, esta misma mezquita fue sacudida por otra explosión. Terminó con la vida de 90 personas y dejó heridas a otras 175. Fue uno de los atentados más graves perpetrados en la capital.

Medidas contra el terror

El nuevo plan de seguridad de las autoridades iraquíes lanzado esta semana no ha podido frenar la escalada de violencia en Bagdad y las poblaciones cercanas. En la jornada de ayer, un coche bomba mató al menos a tres civiles iraquíes en el suroeste de Bagdad y poco antes del último ataque terrorista Horas otras cinco personas murieron acribilladas en un ataque de supuestos rebeldes en la localidad de Faluya, a unos 55 kilómetros al oeste de Bagdad. Las medidas para reforzar la vigilancia están encaminadas a presionar a los integrantes de Al Qaeda tras la muerte del anterior líder de la organización en Irak, Al Zarqaui, y el nombramiento del nuevo, Abu Ayub al Misri. No obstante, a este respecto, la Casa Blanca informó de que aún no tiene claro si éste es el sucesor.