El ministro palestino de Interior, Hani Al-Qawasmi, ha presentado su dimisión, que el primer ministro, Ismail Haniya, ha aceptado, anunció la oficina de Haniya. La renuncia de Al-Qawasmi llega tras el mayor estallido de violencia entre partidarios de Al-Fatah y de Hamas desde que ambos movimientos acordaran formar un Gobierno de unidad nacional en febrero y cuyos enfrentamientos han causado ocho muertos y 17 heridos en las últimas 24 horas.
Las milicias de Hamas y Al Fatah han reanudado sus enfrentamientos, en los que murieron al menos dos personas y otras dos resultaron heridas, rompiendo el alto el fuego conseguido anoche con la ayuda de mediadores egipcios, según informaron fuentes policiales. En la ciudad de Gaza, milicianos del movimiento islamista atacaron la residencia del portavoz de Al Fatah, Maher Meqdad, y mataron a su guardaespaldas antes de incendiar su oficina. Uno de los disparos alcanzó a un viandante, que también murió.
Los medios de comunicación de Hamas informaban de que el ataque contra Meqdad era en represalia porque milicianos de Al Fatah habían disparado contra activistas de ese Movimiento y contra escolares que se dirigían a la escuela.
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