El Gobierno admitió ayer que un nuevo referéndum puede abrir las puertas de la exportación de gas hacia Chile, aunque aclaró que aún no existe una posición oficial para avanzar en ese camino. Algunos sectores sociales como la Central Obrera Regional de El Alto creen que se debe dar mayor fuerza al reclamo marítimo aprovechando la crisis energética que vive el país vecino.
Chile soporta una reducción del 36 por ciento en los envíos de gas natural que realiza Argentina, que debe entregar 22 millones de metros cúbicos diarios, pero no lo hace porque debido a una ola de frío tiene dificultad para abastecer su mercado interno. Esta situación ha puesto en apuros a la industria minera y otras actividades que amenazan al dinamismo de la economía chilena.
El vicepresidente Álvaro García Linera dijo ayer que la venta de gas a Chile es una hipótesis de trabajo, pero que no hay una decisión oficial. El viceministro de Relaciones Económicas Internacionales, Pablo Guzmán Laugier, señaló que el Ejecutivo está dispuesto a avanzar en una integración “en todos los campos” con Chile. Sin embargo, aclaró que antes de emprender una eventual negociación energética se debe tomar en cuenta la limitación que puso el referéndum del gas.
En la consulta del 18 de julio de 2004, la mayoría de la gente le dijo Sí a la pregunta “¿Está usted de acuerdo con la política del presidente Carlos Mesa de utilizar el gas como recurso estratégico para el logro de una salida útil y soberana al océano Pacífico?”.
Según la autoridad, sólo un mandato similar del pueblo puede revocar esa determinación. “Deberíamos convocar a una nueva consulta, o votar en el marco de la nueva Constitución Política del Estado, pero debe ser una decisión soberana del pueblo. Además, tenemos pendiente el tema marítimo, que debe resolverse previamente”. No obstante, el ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas, aseguró que la posibilidad de convocar a una nueva consulta no fue analizada por el Gobierno.
El secretario ejecutivo de la Central Obrera Regional de El Alto (COR), Édgar Patana, aseguró que en caso de que hubiese un nuevo referéndum, la población diría No a la venta de gas a la nación transandina. El dirigente agregó, no obstante, que éste es un buen momento para que el país y el Ejecutivo pongan más énfasis en la reivindicación marítima debido a que Chile tropieza con problemas energéticos, y su necesidad puede obligarle a ceder.
A su vez, el secretario ejecutivo de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de El Alto, Nazario Ramírez, cree que es difícil que el país vecino acepte una política de gas por mar. “Por eso, Bolivia no debe entregar este recurso natural porque aún está vigente la votación del pueblo de julio de 2004”.
En días anteriores, autoridades bolivianas y chilenas lograron avances en la denominada “agenda sin exclusiones”, que incluye el tema marítimo.
Fuente: Diario La Prensa de Bolivia
Chile soporta una reducción del 36 por ciento en los envíos de gas natural que realiza Argentina, que debe entregar 22 millones de metros cúbicos diarios, pero no lo hace porque debido a una ola de frío tiene dificultad para abastecer su mercado interno. Esta situación ha puesto en apuros a la industria minera y otras actividades que amenazan al dinamismo de la economía chilena.
El vicepresidente Álvaro García Linera dijo ayer que la venta de gas a Chile es una hipótesis de trabajo, pero que no hay una decisión oficial. El viceministro de Relaciones Económicas Internacionales, Pablo Guzmán Laugier, señaló que el Ejecutivo está dispuesto a avanzar en una integración “en todos los campos” con Chile. Sin embargo, aclaró que antes de emprender una eventual negociación energética se debe tomar en cuenta la limitación que puso el referéndum del gas.
En la consulta del 18 de julio de 2004, la mayoría de la gente le dijo Sí a la pregunta “¿Está usted de acuerdo con la política del presidente Carlos Mesa de utilizar el gas como recurso estratégico para el logro de una salida útil y soberana al océano Pacífico?”.
Según la autoridad, sólo un mandato similar del pueblo puede revocar esa determinación. “Deberíamos convocar a una nueva consulta, o votar en el marco de la nueva Constitución Política del Estado, pero debe ser una decisión soberana del pueblo. Además, tenemos pendiente el tema marítimo, que debe resolverse previamente”. No obstante, el ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas, aseguró que la posibilidad de convocar a una nueva consulta no fue analizada por el Gobierno.
El secretario ejecutivo de la Central Obrera Regional de El Alto (COR), Édgar Patana, aseguró que en caso de que hubiese un nuevo referéndum, la población diría No a la venta de gas a la nación transandina. El dirigente agregó, no obstante, que éste es un buen momento para que el país y el Ejecutivo pongan más énfasis en la reivindicación marítima debido a que Chile tropieza con problemas energéticos, y su necesidad puede obligarle a ceder.
A su vez, el secretario ejecutivo de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de El Alto, Nazario Ramírez, cree que es difícil que el país vecino acepte una política de gas por mar. “Por eso, Bolivia no debe entregar este recurso natural porque aún está vigente la votación del pueblo de julio de 2004”.
En días anteriores, autoridades bolivianas y chilenas lograron avances en la denominada “agenda sin exclusiones”, que incluye el tema marítimo.
Fuente: Diario La Prensa de Bolivia
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