Los 20 céntimos de real (unos 7 céntimos de euro) que desataron el malestar social en Brasil serán recuperados por los usuarios de transporte público en Sao Paulo y en Río de Janeiro. El anuncio realizado ayer por las autoridades de ambas metrópolis, pilló de sorpresa a miles de manifestantes en las calles de Niteroi, ciudad vecina a Río donde tambiénse ha revocado el aumento, que recibieron la noticia con tímidos aplausos y con la certeza de que las protestas van a continuar.
"Me parece perfecto que bajen el precio de los billetes, se dan cuenta de que tenemos fuerza, pero no vamos a parar aquí. El problema real no son 20 céntimos, el problema es la salud, la educación... Brasil ha despertado", afirmaba Juliana Alves, presidenta de la Asociación Estudiantil de Niteroi, minutos después de conocer por los megáfonos la vuelta de las tarifas anteriores.