Bachelet debuta con promesa de unidad, participación y protección social

A las 19.30, la Mandataria apareció en un balcón de La Moneda agitando una bandera chilena. Las miles de personas en la Plaza de la Constitución comenzaron a cantar espontáneamente el Himno Nacional. "¡Viva Chile!", dijo Bachelet, para luego volver a aparecer con su madre, Angélica Jeria, y sus tres hijos. En su discurso, Bachelet puso énfasis en la unidad nacional y reafirmó su preocupación por la diversidad, la participación y la protección social. Aunque rindió tributo a Aylwin, Frei y especialmente a Lagos, no mencionó nunca a la Concertación ni a los partidos que la respaldan. También recordó a su padre, el general Alberto Bachelet, que murió un día como hoy de 1974. Pero también saludó a las FF.AA., señalando que "hoy son patrimonio de todos los chilenos" y dio por totalmente normalizadas las relaciones cívico-militares.

Fin de las divisiones

"Ha llegado el momento en que nos miremos unos a otros sin resquemores ni suspicacias. El pasado es el pasado y no lo olvidaremos, porque como dijera el Presidente Lagos, no hay mañana sin ayer. No queremos repetir los errores del pasado, y queremos un futuro más próspero, más justo, más igualitario y más participativo", afirmó la Presidenta Bachelet en el arranque de su primer discurso en La Moneda. La cita a su antecesor buscó señalar su énfasis en la unidad y el reencuentro, a 16 años del fin del régimen militar. La idea cobró mayor fuerza más adelante, cuando dio por totalmente normalizadas las relaciones entre las Fuerzas Armadas y el mundo civil al afirmar: "Quiero saludar a las FF.AA., que hoy son patrimonio de todos los chilenos". El mismo concepto tuvo su tercera expresión, cuando enumeró a los ex presidentes y hombres de Estado cuyas estatuas están en la Plaza de la Constitución: Diego Portales, Jorge Alessandri, Eduardo Frei Montalva y Salvador Allende. Al mencionarlos, y de ese modo aludir a figuras de izquierda, de la DC y derecha, afirmó que "todos ellos simbolizan el país del siglo XX, nuestra vocación democrática y una época de progreso y avance social". Luego agregó: "Soy depositaria de una historia que tuvo momentos grises y amargos, pero que ha sabido recuperarse: los chilenos hoy vivimos mejor y más libres que antes".
Diversidad y la participación

Recuperando dos ejes de su campaña, la inclusión social y la participación ciudadana, Bachelet dijo que Chile debe construir "un futuro mejor, en donde caben todos en una patria inclusiva, donde ninguna diversidad esté afuera, donde nadie sienta que su destino está a la intemperie". "En Chile no habrá ciudadanos olvidados", dijo, al hablar de los indígenas y de los discapacitados. Y en lo que fue una suerte de definición de su estilo, afirmó: "Quiero establecer un diálogo basado en la franqueza y la participación. Un gran pacto entre la ciudadanía y los gobernantes". Poco después volvió sobre el mismo tema y dijo que surgía ahora "una nueva forma de ver y hacer la política, más inclusiva, más participativa, más abierta, más transparente".

Agenda de protección social

Bachelet afirmó ayer que su gobierno pondrá prioridad en las redes de protección social y las oportunidades. Dijo que sus "afanes estarán en los niños, para que puedan desarrollarse y aprender y eliminar todo rastro de desigualdad". Habló de los adultos mayores (para quienes pretende mejorar las pensiones) y de "los que aspiran a un trabajo, pero no uno cualquiera, sino digno y decente".
Trabajar rápido

En una muestra de la llamada "impronta yankee" de su equipo, Bachelet pronunció una cita del ex gobernador de Nueva York, Mario Cuomo, a quien calificó de "gran pensador". La frase -"las campañas se hacen en poesía, pero el gobierno se hace en prosa"- fue una forma de advertir que en su gobierno surgirán dificultades y no habrá respuestas a todas las demandas. Más aún cuando su período durará cuatro y no seis años, como el de sus antecesores. "Sabemos que en cuatro años no vamos a resolver todos los problemas, pero vamos a dar un paso adelante", dijo.
Ausencia de los partidos

La nueva Mandataria rescató la obra de los gobiernos de Aylwin, Frei y Lagos. Sin embargo, en ningún momento mencionó ni agradeció a la Concertación ni a los partidos políticos que la componen. Su única alusión al mundo político fue para el Congreso, del que dijo esperar su apoyo. Al omitir mencionar al establishment oficialista, Bachelet reforzó un sello que surgió desde su triunfo en enero: su distancia de los partidos, como demostró al escoger a su equipo de gobierno.
Alusión a Lagos

En tres ocasiones Bachelet se refirió a Ricardo Lagos. Lo calificó como "un gran Presidente" y pidió que aplaudan más fuerte por él, porque "se lo merece". Antes de hablar de su antecesor homenajeó a Aylwin y Frei, y justo cuando pretendía rendir tributo a Lagos, la gente en la plaza comenzó a corear su nombre, como creyendo que lo había olvidado. "Momentito, llevamos unas poquitas horas y ya me quieren mandar", respondió Bachelet, antes de hablar del ex Presidente. Sus palabras contrastaron con una frase que había dicho poco antes, al declararse "depositaria" de un mandato de los chilenos, que la habían elegido.

Fuente: Diario La Tercera de Santiago