Kirchner concluyó visita a Chile

Concluyó la visita oficial que por espacio de 24 horas realizara a nuestro país el Presidente de Argentina, Néstor Kirchner. Las conclusiones esta visita en el análisis de Libardo Buitrago.

La primera de ellas, el gas. Kirchner quedó comprometido con Chile, que para durante el mes de abril recibamos a través del gasoducto, volúmenes cercanos a los 22 millones de metros cúbicos diarios que importamos. Las últimas semanas se recortó a un promedio - 70% - diario de 8 millones de metros cúbicos, los envíos que afectaron a empresas nacionales. Segundo, Kirchner y Lagos, pese a la dificultad que genera el gas, volvieron a colocar las relaciones bilaterales en un alto nivel de confianza. Tercero, es el punto de partida que esperamos sirva para cumplir y honrar los compromisos, que es la verdadera manera en que se construye una confianza mutua, pilar fundamental de las relaciones internacionales.

Le vamos a dar al Presidente Kirchner el beneficio de confiar en su palabra. Si nos dijo que sería abril, esperaremos que así sea. Kirchner responsabilizó de los recortes a las empresas encargadas de la explotación y exploración de los recursos energéticos en la Argentina. Esta no es la primera vez que el presidente Kirchner acusa a las empresas petroleras por los cortes de gas a Chile. El año pasado, cuando empezaron las restricciones por la falta de inyección desde los yacimientos, dijo que se trataba de contratos privados y que las compañías no habían invertido lo suficiente. No estaba llegando a Buenos Aires, de regreso, cuando se escuchó la voz de las empresas que respondieron, que, aunque es cierto que se trata de convenios privados, esos acuerdos fueron violados porque el Gobierno Argentino, mediante una resolución del año pasado, las obliga a abastecer al mercado local antes que cumplir con los compromisos alcanzados con las empresas chilenas. Ahora bien, la falta de inversión en la producción de gas en la Argentina de los últimos años es rigurosamente cierta. De hecho, antes de producirse la devaluación que terminó con el sistema de la convertibilidad un peso igual que un dólar, se perforaban en la Argentina 100 pozos de gas por año, y esa cifra no llega ahora a 25. Pero en este punto, una vez más, ambas partes se acusan mutuamente: Kirchner dice que las empresas no invirtieron y los privados, que a nadie le conviene arriesgar capital con los precios actuales de los servicios públicos. Y en la mitad de ese nudo hemos quedado los chilenos.

Lo que esperamos en esta dirección es que tanto el gobierno Argentino como las Empresas, lleguen lo más pronto posible a un acuerdo, que facilite dos cosas: seguir con las exploraciones para hallar nuevos yacimientos de gas, y así ampliar la oferta energética, y segundo, que producto de lo anterior, se satisfaga las necesidades de dos economías que están creciendo sostenidamente y que requieren de esa solución.

Por lo demás hemos tomado la ruta lógica de dos naciones que sus líderes nos han dicho que aclararon los puntos candentes. Debemos interpretar, que si nos llamamos aliados estratégicos, con un destino común, es porque vamos a profundizar la relación bilateral, y para ello lo básico es cumplir con lo que nos obligamos.