miércoles, junio 22, 2005

EL ANILLO ENERGETICO

En la Cumbre del MERCOSUR concluida ayer, la decisión política de concretar el anillo energético ha sido la decisión más importante. ¿Cuánto le conviene a Chile involucrarse en esta iniciativa? Y ¿si acaso se tendrá la seguridad que el suministro de gas se respetara? Son las dos preguntas que vale la pena responder. El proyecto del anillo energético tiene a Perú como el eje abastecedor de gas desde sus yacimientos. En este cuadro Chile es una pieza vital de conexión para concretar esta iniciativa. Sin embargo, para convertirla en realidad y evitar las amargas experiencias recientes, con el suministro del gas, Chile debe primero que todo asegurarse que los acuerdos que le den vida a este proyecto, sean dentro de un marco institucional por medio del cual los países involucrados ofrezcan y cumplan con garantías jurídicas reales y den certidumbre jurídica de cumplimiento de que las inversiones quedarán debidamente protegidas y segundo, que por sobre los complejos cuadros internos de cada nación, prime responder, honrar los contratos. Con esos elementos se podrá concurrir a facilitar los acuerdos que se requieren para que con el anillo energético se logre la autonomía energética regional y contribuya el crecimiento económico sostenido de los países de América del Sur. Esta es la mejor manera de realizar la integración física regional que tanto se pregona, y ponga a los gobernantes a trabajar en los reales aspectos que contribuyen al crecimiento y desarrollo de los pueblos. El proyecto contempla el tendido de un gasoducto de 1.200 kilómetros desde Pisco, Perú, hasta Tocopilla con un costo estimado de 2.500 millones de dólares que será financiado por el BID. Es preciso advertir, que no solo se debe esperar que Perú sea el principal país que suministre el gas. No es suficiente. Es la hora de insertar a Bolivia en esta iniciativa. Se debe buscar un camino de acción política para subir a esta nación y no sienta que se está dejando aislada y ahí si se tendrían las fuentes y reservas de gas para atender las actuales y futuras demandas, como vayan creciendo económicamente los países. Parte de la ecuación energética de este anillo es Bolivia. Para lo cual se debe sumar todas las reservas hidroeléctricas, gasíferas y de petróleo. Eso es lo que entendemos como un anillo energético. La condición básica de participar en este proyecto, debe estar vinculada a que sea el BID quién dirija los equipos de trabajo, que construya el marco institucional que tiene que proteger, y servir de paraguas a las inversiones asociadas, el que apoye con el financiamiento, de manera que sea con sus instrumentos, el garante que requiere este proyecto.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

 
Libardo Buitrago / Blog © 2013 | Designed by RA