Los estadounidenses beben 10 veces más agua embotellada que en 1980, siguen a la cabeza en la lista de habitantes más gordos del planeta y destinan la mitad de su vida a ver la televisión, navegar por internet, oír la radio y leer periódicos. Ese es el retrato del estadounidense medio que traza la última entrega estadística sobre EEUU del Departamento del Censo, una avalancha de cifras, en algunos casos muy reveladoras, sobre quiénes son y a qué se dedican los ciudadanos de la superpotencia.
El libro del Censo incluye más de 1.400 tablas y gráficos con datos políticos, sociales y económicos, y aporta por primera vez cifras como las de contactos sexuales con personas del mismo sexo, algo que dijeron practicar el 6 por ciento de los hombres y el 11,2 por ciento de las mujeres. El voluminoso compendio estadístico divulgado esta semana destaca que en el 2007 los estadounidenses destinarán más tiempo que nunca -unos cinco meses anuales- a ver la televisión, utilizar el ordenador, leer, ver películas o escuchar la radio.
Los adolescentes y los adultos pasan una media de 64 días "enchufados" a la TV, 41 días escuchando la radio y algo más de una semana utilizando internet, según la agencia gubernamental. "La demanda de información y entretenimiento parece insaciable", dijo en unas declaraciones al diario "The New York Times" James Rutherfurd, vicepresidente ejecutivo de Veronis Suhler Stevenson, una firma de investigación sobre medios que aparece citada en el informe del Censo.
Dentro de ese escenario, internet se perfila como una herramienta cada vez más importante para obtener información y servicios. Los últimos datos muestran que los estadounidenses pasaron una media de 183 horas en la web el año pasado, frente a las 104 horas del 2000.
Por lo demás, un total de 97 millones de adultos utilizó la web como fuente para obtener noticias, 92 millones compraron algún producto a través de internet y 91 millones hicieron una reserva de viajes por ese medio. A ellos se suman los 13 millones que crearon un "blog" en el 2005 y los 16 millones que recurrieron a algún tipo de sitio virtual para socializar o mantener relaciones profesionales. "Está claro que el uso de la web es creciente", dijo a Efe Christopher Jencks, profesor de sociología de la Universidad de Harvard, quien señala que "lo que todavía no está tan claro es el efecto sociológico derivado de esa tendencia". El académico apunta como cambio significativo el que la web se utilice cada vez más como herramienta de movilización política. Las estadísticas recién divulgadas indican también que el estadounidense sigue siendo un gran consumidor de todo tipo de productos, desde agua, hasta zapatos y alimentos ecológicos.
Ese consumismo no va aparejado, de todos modos, con una mayor felicidad, según Jencks. "En las últimas décadas nos hemos vuelto mucho más ricos, pero no más felices", asegura el profesor de Harvard, quien cree que sus compatriotas deberían concentrarse en cultivar las relaciones con amigos y familiares en lugar de hacerlo en acumular cada vez más cosas. En ese sentido, las estadísticas apuntan que mientras que en 1970, el 79 por ciento de los ciudadanos de EEUU decía que su objetivo era desarrollar una filosofía de vida coherente, en el 2005, el 75 por ciento aseguró que su prioridad era alcanzar una muy buena situación financiera. La tendencia al consumo se tradujo en una mayor generación de basura, que alcanza ya una media de dos kilos diarios por persona, frente a los 1,6 kilos de 1980.
En otro orden de cosas, el informe del Censo revela que los estadounidenses son más altos y que las diferencias entre hombres y mujeres tienden a reducirse. Así, mientras que en 1980 sólo el 12 por ciento de las mujeres era médico, en 2004 el porcentaje era ya del 27 por ciento. Además, EEUU registró en 2004 el mayor número de nacimientos de las últimas décadas, con la excepción de 1960 y 1990, así como la menor tasa de divorcios desde 1970. En el terreno económico destaca la reducción de puestos de trabajos manufactureros, que cayeron casi un 18 por ciento entre 2000 y 2005.
El libro del Censo incluye más de 1.400 tablas y gráficos con datos políticos, sociales y económicos, y aporta por primera vez cifras como las de contactos sexuales con personas del mismo sexo, algo que dijeron practicar el 6 por ciento de los hombres y el 11,2 por ciento de las mujeres. El voluminoso compendio estadístico divulgado esta semana destaca que en el 2007 los estadounidenses destinarán más tiempo que nunca -unos cinco meses anuales- a ver la televisión, utilizar el ordenador, leer, ver películas o escuchar la radio.
Los adolescentes y los adultos pasan una media de 64 días "enchufados" a la TV, 41 días escuchando la radio y algo más de una semana utilizando internet, según la agencia gubernamental. "La demanda de información y entretenimiento parece insaciable", dijo en unas declaraciones al diario "The New York Times" James Rutherfurd, vicepresidente ejecutivo de Veronis Suhler Stevenson, una firma de investigación sobre medios que aparece citada en el informe del Censo.
Dentro de ese escenario, internet se perfila como una herramienta cada vez más importante para obtener información y servicios. Los últimos datos muestran que los estadounidenses pasaron una media de 183 horas en la web el año pasado, frente a las 104 horas del 2000.
Por lo demás, un total de 97 millones de adultos utilizó la web como fuente para obtener noticias, 92 millones compraron algún producto a través de internet y 91 millones hicieron una reserva de viajes por ese medio. A ellos se suman los 13 millones que crearon un "blog" en el 2005 y los 16 millones que recurrieron a algún tipo de sitio virtual para socializar o mantener relaciones profesionales. "Está claro que el uso de la web es creciente", dijo a Efe Christopher Jencks, profesor de sociología de la Universidad de Harvard, quien señala que "lo que todavía no está tan claro es el efecto sociológico derivado de esa tendencia". El académico apunta como cambio significativo el que la web se utilice cada vez más como herramienta de movilización política. Las estadísticas recién divulgadas indican también que el estadounidense sigue siendo un gran consumidor de todo tipo de productos, desde agua, hasta zapatos y alimentos ecológicos.
Ese consumismo no va aparejado, de todos modos, con una mayor felicidad, según Jencks. "En las últimas décadas nos hemos vuelto mucho más ricos, pero no más felices", asegura el profesor de Harvard, quien cree que sus compatriotas deberían concentrarse en cultivar las relaciones con amigos y familiares en lugar de hacerlo en acumular cada vez más cosas. En ese sentido, las estadísticas apuntan que mientras que en 1970, el 79 por ciento de los ciudadanos de EEUU decía que su objetivo era desarrollar una filosofía de vida coherente, en el 2005, el 75 por ciento aseguró que su prioridad era alcanzar una muy buena situación financiera. La tendencia al consumo se tradujo en una mayor generación de basura, que alcanza ya una media de dos kilos diarios por persona, frente a los 1,6 kilos de 1980.
En otro orden de cosas, el informe del Censo revela que los estadounidenses son más altos y que las diferencias entre hombres y mujeres tienden a reducirse. Así, mientras que en 1980 sólo el 12 por ciento de las mujeres era médico, en 2004 el porcentaje era ya del 27 por ciento. Además, EEUU registró en 2004 el mayor número de nacimientos de las últimas décadas, con la excepción de 1960 y 1990, así como la menor tasa de divorcios desde 1970. En el terreno económico destaca la reducción de puestos de trabajos manufactureros, que cayeron casi un 18 por ciento entre 2000 y 2005.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario