Mientras la tensión ascendente entre Washington y Moscú continuó alimentando ayer los temores a una nueva Guerra Fría, el presidente norteamericano, George W. Bush, inició una gira por Europa, cuyo eje principal será el enfrentamiento con Rusia por el escudo antimisiles que Estados Unidos proyecta construir en el Viejo Continente. Con motivo de la cumbre del Grupo de los Ocho (G-8), que se celebrará en Alemania a partir de mañana, Bush dio comienzo a una gira por media docena de países, una de las más difíciles de su mandato. En su primera escala, llegó ayer a la República Checa; luego viajará a Polonia.
Es en estos ex satélites soviéticos donde el gobierno norteamericano está decidido a desplegar el escudo antimisiles que dice necesitar para defenderse de un posible ataque de Irán o Corea del Norte. El proyecto ha desatado fuertes críticas de Rusia y el presidente Vladimir Putin amenazó anteayer con apuntar sus misiles hacia Europa si los planes de Washington se concretan. La escalada verbal continuó ayer, cuando la Casa Blanca y la OTAN repudiaron las declaraciones del líder ruso. "[La posición de Putin] no ayuda a mejorar las relaciones entre Rusia y Estados Unidos", dijo el asesor de Seguridad Nacional, Stephen Hadley. También la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, respondió al gobernante ruso: "La seguridad de Estados Unidos y la seguridad de sus aliados europeos es indivisible".
En tanto, el vocero de la OTAN, James Appathurai, afirmó: "Este tipo de comentarios no son útiles y menos, bienvenidos". Bush y Putin se encontrarán en la cumbre del G-8 que se realizará en Alemania a partir de mañana, en el balneario de Heiligendamm, donde se da por descontado que el espinoso tema del escudo se impondrá como una de las cuestiones centrales de la reunión, en la que también se tratará el calentamiento terrestre. El mensaje de Bush anterior al viaje apuntó a intentar calmar los ánimos: le recordó a Rusia que "la Guerra Fría ha terminado". Sin embargo, las visitas del presidente norteamericano a la República Checa y a Polonia son consideradas un desafío por Putin .
No hay comentarios.:
Publicar un comentario