viernes, enero 16, 2009

¡Basta ya! TRIBUNA: RICARDO LAGOS ex Presidente de Chile

La invasión israelí de Gaza y la feroz lucha en la Franja, tras los lanzamientos de cohetes y misiles entre Hamás e Israel, contribuyen poco o nada a la paz en Oriente Próximo. La condena internacional de esta nueva guerra entre Israel y Palestina y los llamamientos a un alto el fuego han sido tan rápidos como la propia incursión. Pese a ello, hasta que los líderes de la región decidan que ya es suficiente, la paz no tiene una oportunidad real.

Ya nos pronunciamos antes de la incursión terrestre, pero dada la escalada del conflicto nos sentimos obligados a manifestarnos de nuevo. Esta vez con un lenguaje más fuerte hacia las partes enfrentadas. Como ex presidentes y primeros ministros, y como miembros del Club de Madrid, decimos: "¡Basta!". Y urgimos a los líderes de Oriente Próximo a decir ¡Basta! a la guerra y el sufrimiento y ¡Basta! a la incapacidad de asumir el camino de la paz.

Los llamamientos internacionales para un inmediato alto el fuego y los esfuerzos diplomáticos para conseguirlo son necesarios pero no suficientes como respuesta a la agresión, la guerra y el asesinato de civiles inocentes en nombre de la seguridad o la autodeterminación. La violencia de ahora, como en el pasado, nace de la sangre y sólo alimentará un mayor derramamiento de sangre. Es otro capítulo -quizás destinado a convertirse en uno de los peores- de una larga saga.

Más de 1.000 muertos. Miles de heridos. Edificios y escuelas de la ONU bombardeados. Refugiados sin refugios. El uso de escudos humanos. La profunda inseguridad. Las víctimas se acumulan y, en ambos bandos, son mayores entre los civiles que entre los combatientes. Los cohetes de Hamás son menos mortales que los misiles israelíes, pero atacan cinco veces más a los civiles que a los soldados. Los objetivos de Israel son sólo los combatientes enemigos, pero los daños colaterales incluyen a trabajadores de Naciones Unidas y a más de 300 niños palestinos, mientras que el "fuego amigo" de Tzahal ha matado tantos soldados israelíes como Hamás. Entretanto, algunos líderes de la región urgen de forma infame a su juventud a cometer un suicidio masivo en respuesta. Este ciclo enfermizo debe ser atajado de raíz. Ahora. Antes de que la historia se repita a sí misma con una ocupación prolongada, más terrorismo suicida y desastrosas consecuencias políticas. Y el ciclo sólo puede terminar cuando los líderes estén dispuestos a asumir el riesgo de la paz.

Hacemos un llamamiento a los líderes implicados en la crisis a cesar y desistir y a pedir a sus vecinos que hagan lo mismo. ¿Quieren esos dirigentes de Oriente Próximo ser recordados por las víctimas o por el liderazgo que puso fin a las mismas? Les preguntamos: ¿por qué no decir a vuestros colegas de Gabinete y a vuestro círculo de asesores de alto nivel que planeáis utilizar vuestro liderazgo para salir de la muerte y la destrucción? Por el bienestar de vuestros propios pueblos. No esperéis a los otros.

Siga leyendo el artículo del ex Presidente Ricardo Lagos Escobar en el diario El País de España

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

 
Libardo Buitrago / Blog © 2013 | Designed by RA