Ad portas de las elecciones del domingo 5 de junio, Ollanta Humala Tasso ha decidido retomar su discurso radical y, como hace solo unos meses y dejando de lado la imagen conciliadora que sus asesores extranjeros le han creado, ayer volvió a incentivar a la población contra el Gobierno y, aún más, se pronunció en contra de la erradicación de la hoja de coca.
MENSAJES CLAROS. Por la mañana, minutos antes de que la población de Puno evaluara si aceptaba o no el acuerdo entre sus autoridades y el Ejecutivo, el candidato de Gana Perú dijo, a través de Radioprogramas, que “en Puno no quieren suspensión porque saben que eso puede ser como Bagua. Ellos quieren la seguridad de que se toma una decisión, y eso no puede ser una suspensión que, en estas situaciones, la ven como una ambigüedad, una 'mecida’ (del Gobierno)”.
La solución que exige Humala no es otra que la anulación de las concesiones mineras otorgadas por el Gobierno. Pero, más aún, el líder nacionalista alertó de las supuestas intenciones del Ejecutivo de evitar las elecciones en esa ciudad. “Todos sabemos que Puno es un bolsón nacionalista, sabemos a quién afectaría que no vayan a votar”, precisó.
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