Fidel Castro ha cumplido 87 años de edad, este martes 13, apartado el poder gubernamental, de los micrófonos y de publicar artículos en la prensa local. Su agenda como jubilado está destinado a su persistente credo de ensayar cultivos destinados a mejorar la alimentación de los cubanos, navegar en Internet, recibir ocasionalmente líderes extranjeros y recorrer en una furgoneta provincias próximas a la capital.

El estado de salud del 'Comandante en Jefe', como históricamente le llaman los cubanos, es un blindado secreto de Estado desde queenfermó y cedió el mando a su hermano Raúl, cinco años menor, el 31 de julio de 2006. "Debo respetar la obvia resistencia de los guardianes de la salud", alegó en carta para justificar su ausencia a los ocho mandatarios latinoamericanos y caribeños que asistieron a la reciente a la conmemoración del 60 aniversario del asalto al cuartel Moncada, en Santiago de Cuba, el pasado 26 de julio.
El líder de la revolución cubana, años atrás, festejaba su cumpleaños con niños, que le cantaban y comían torta con él, en el Palacio de los Pioneros de La Habana. Durante los 47 años de su mandato nunca se difundieron fotos de Castro festejando su cumpleaños en el entorno familiar. Castro, durante su mandato, nunca permitió difusión pública de su entorno familiar.
Su última intervención oficial fue el 24 de febrero de 2013 en la Asamblea Nacional del Poder Popular (parlamento unicameral) donde Castro acudió para agradecer "el noble gesto del pueblo al elegirme como diputado". El líder cubano, en esa ocasión, anunció que "no será mucho el tiempo que ocupe en la intervención de hoy, ni tampoco el espacio de este honroso escaño como diputado, y no por falta de voluntad, sino por imperativo de la naturaleza. Jamás pensé que mi existencia se prolongara tanto", afirmó. Pero Castro, desde entonces, no ha asistido a las sesiones del singular parlamento cubano.
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