Un toma de rehenes en Alemania modifica la agenda electoral de Merkel

La canciller alemana Angela Merkel tenía previsto un acto electoral en la ciudad sureña de Ingolstadt esta tarde, pero lo ha cancelado debido a la toma de rehenes en el Ayuntamiento de la ciudad. No se sabe a ciencia cierta si el secuestro está relacionado o no con la campaña electoral, aunque la policía no ve indicios, pero la Cancillería alega cuestiones de seguridad, ya que la ciudad está bloqueada por una operación policial difícilmente compatible con las medidas de seguridad que rodean a la canciller alemana.

"Lo primero son las vidas de los rehenes", insisten fuentes de la Cancillería explicando las prioridades establecidas. La toma de rehenes ha comenzado esta mañana, cuando un hombre armado ingresó en el edificio del Ayuntamiento hacia las 9:00 de la mañana y se encerró la segunda planta con al menos tres rehenes, aunque no se ha precisado el número exacto.

Según un portavoz de la policía, se trata de un hombre de 24 años y sin domicilio fijo que ya en el pasado habría sido expulsado del edificio por amenazar e insultar a una empleada del Ayuntamiento. Un negociador ha entrado en contacto con él, aunque no se ha hecho público el contenido de la conversación ni si ha formulado alguna petición concreta.

Varios medios locales informan de que se trata de una persona en tratamiento psiquiátrico en un centro médico de Ingolstadt del que habría escapado sin autorización médica. Anteriormente habría sido sentenciado a prisión de un año y ocho meses, condena suspendida precisamente por su estado de salud mental.

Un médico que conoce su historial ha informado a la policía que se trata de un perfil "depresivo-traumático" y que es una persona "altamente manipuladora".

Uno de los rehenes es el vicealcalde de la ciudad, Sepp Misslbeck, ya ha sido puesto en libertad y se encuentra en buen estado. Aún permanecen dos personas retenidas.

FUENTE: EL MUNDO DE ESPAÑA