Mahmu Abbas Presidente de la Autoridad Nacional Palestina invitó a Hamas al Gobierno

El presidente palestino, Mahmud Abbas (Abu Mazen), ha invitado al grupo islámico Hamas a formar parte de su Gobierno inmediatamente y 'observar juntos' la retirada de Israel de la franja de Gaza, según fuentes del grupo armado. Esta organización terrorista no ha tomado aún una decisión sobre su entrada en el Gabinete palestino, una opción calificada por Israel de 'inaceptable', según el diario israelita Haaretz. La dirección de Hamas en los territorios palestinos y en el exterior está considerando la oferta de Abbas y todavía no ha tomado la decisión final. Abbas hizo la proposición a principios de esta semana, después de que Hamas le exigiera la formación de un comité especial que garantizara el traspaso de poder en Gaza a lo que se negó y, en su lugar, ha considerado la entrada del grupo islámico en el Gobierno. Además, este grupo armado rechazó las recomendaciones del Comité Central del movimiento Fatah para celebrar las elecciones legislativas el 20 de enero de 2006. Hamas se ha revelado como un peligroso rival electoral para el movimiento gobernante de Al Fatah y este hecho, según los observadores, fue el que llevó a Mazen a retrasar las elecciones previstas para este mismo mes de julio.
Amenaza al proceso de paz
El Gobierno de Ariel Sharon no ha tardado en responder a esta iniciativa. El portavoz del ministro de Exteriores, Mark Regev, ha advertido de que la presencia de este grupo islámico en el Gabinete de Abu Mazen es para Israel 'inaceptable' y no ayudaría al proceso de paz."Hamas es una organización responsable de incontables actos de violencia contra civiles inocentes", recordó Regev para advertir a continuación que este grupo armado es "parte de problema no de la solución". La propuesta de Mazen a Hamas llegan en medio de un débil impulso a las negociaciones entre Israel y la ANP después del alto el fuego acordado en Egipto el pasado 8 de febrero. La posibilidad que ahora se abre con Hamas en el Gobierno podrían dinamitar los escasos avances logrados en los últimos meses.