El primer ministro bávaro, Edmund Stoiber, ha agravado hoy la primera crisis del futuro Gobierno alemán antes incluso de que este asuma sus funciones. Stoiber, líder además del CSU, la versión bávara de la Unión Cristiano Demócrata (CDU) que ganó en la foto finish las elecciones del pasado 18 de septiembre, ha renunciado a ocupar el ministerio de Economía y Tecnología que le había asignado la futura canciller, Angela Merkel. Su decisión complica la formación del Ejecutivo, en el que la CDU y los socialdemócratas se reparten salomónicamente las carteras. El puesto de Stoiber será ocupado por otro dirigente conservador de Baviera, Michael Glos, de 60 años. El cambio de opinión de Stoiber, llamado a ocupar un puesto clave en el futuro Gobierno, se produjo ayer después de que el jefe del partido socialdemócrata (SPD), Franz Müntefering, con quien había trabado una relación de gran confianza durante las negociaciones para alcanzar una gran coalición, asegurara que no seguiría en su puesto al frente de la formación. El líder bávaro ya adelantó entonces que la situación de cara a una gran coalición había cambiado y que tomaría una decisión sobre su posible marcha a Berlín. Esta tarde, sin embargo, el propio Müntefering ha abierto la puerta a una solución de la crisis al declarar que estaría dispuesto a entrar en el Ejecutivo alemán como vicecanciller y ministro de Trabajo, según ha afirmado el ministro-presidente de Renania Palatinado, Kurt Beck. Este testimonio se refuerza por la carta que el propio Müntefering ha enviado a varios compañeros de partido y que ha difundido la agencia Reuters. “Queridos compañeros, el cambio generacional en la cúpula del SPD se está produciendo antes de lo que había supuesto. Quiero contribuir a ello desde dentro del Gobierno, si finalmente se establece, y en estrecha cooperación con quienes lideren el SPD en el futuro”, dice la misiva. Pese a la situación creada por tanto la CDU como el SPD quieren seguir adelante con las negociaciones de coalición y llevarlas al éxito en el término de dos semanas. Sin embargo, dentro de la CDU hay temores de que el SPD de un giro a la izquierda que entorpezca o incluso haga imposible las negociaciones de coalición. La crisis del SPD se generó después de que Andrea Nahles, una figura representativa del ala izquierda del partido, fuera designada por la cúpula como secretaria general contra la voluntad expresa de Müntefering.
Temor a un giro a la izquierda
De momento, los tres partidos -CDU, SPD y liberales- siguen con las negociaciones de coalición, los grupos de trabajo continúan reuniéndose bajo la dirección del propio Müntefering, quien todavía será durante dos semanas líder del SPD y que en ese periodo llevará la alianza a feliz término. Sin embargo, en la CDU existe el temor de que la derrota interna que sufrió Müntefering sea el comienzo de un giro hacia la izquierda de parte del SPD que puede traer consigo nuevas exigencias en las negociaciones que para los cristianodemócratas serían imposibles de cumplir. En este nuevo escenario, ya hay analistas que consideran que la coalición roji-negra tiene los días contados y vuelve a apostar por un gobierno Jamaica, con los negros de la CDU, los amarillos (liberales) del FDP y los Verdes. Sin embargo los liberales han reiterado en numerosas ocasiones que no estarían dispuestos a entrar en un Gobierno con los ecologistas.
Temor a un giro a la izquierda
De momento, los tres partidos -CDU, SPD y liberales- siguen con las negociaciones de coalición, los grupos de trabajo continúan reuniéndose bajo la dirección del propio Müntefering, quien todavía será durante dos semanas líder del SPD y que en ese periodo llevará la alianza a feliz término. Sin embargo, en la CDU existe el temor de que la derrota interna que sufrió Müntefering sea el comienzo de un giro hacia la izquierda de parte del SPD que puede traer consigo nuevas exigencias en las negociaciones que para los cristianodemócratas serían imposibles de cumplir. En este nuevo escenario, ya hay analistas que consideran que la coalición roji-negra tiene los días contados y vuelve a apostar por un gobierno Jamaica, con los negros de la CDU, los amarillos (liberales) del FDP y los Verdes. Sin embargo los liberales han reiterado en numerosas ocasiones que no estarían dispuestos a entrar en un Gobierno con los ecologistas.
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