Ollanta Humala ya actúa como ganador, y con esa confianza ayer pidió explicaciones a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, por la adquisición que hará su país de un centenar de tanques alemanes modelo ‘Leopard 2’. Enterado sobre esta nueva adquisición bélica que hará el vecino país del sur, el candidato presidencial de Unión Por el Perú dijo que Chile rompe el equilibrio estratégico en la región. Y frente a ese escenario, adelantó que en un eventual gobierno suyo pondrá énfasis en dar operatividad al material bélico del país para tener unas fuerzas armadas “disuasivas”, pues aclaró que “no tiene pensado iniciar una carrera armamentista con ningún país vecino”.
Baño de popularidad
Ollanta también actuó como ganador cuando se mezcló con sus simpatizantes en un recorrido proselitista por el norte chico. Incluso corrió varios metros, poniendo en apuros a su seguridad. En Ancón, en un arranque de euforia, se arrojó desde el estrado y se confundió con la gente que lo abrazaba y jaloneaba, mientras se escuchaba desde un megáfono una voz que repetía una y otra vez: “Ollanta en primera vuelta”. Luego de unos minutos, la caravana enrumbó con dirección a Chancay, donde ya lo esperaban sus simpatizantes. Algunas mujeres le mostraban ollas de aluminio y de barro como muestra de respaldo. En la plaza de armas, Ollanta habló de temas que afectan e indignan a la población, como la jornada de las 8 horas diarias, la corrupción y el empleo.
Ollanta también actuó como ganador cuando se mezcló con sus simpatizantes en un recorrido proselitista por el norte chico. Incluso corrió varios metros, poniendo en apuros a su seguridad. En Ancón, en un arranque de euforia, se arrojó desde el estrado y se confundió con la gente que lo abrazaba y jaloneaba, mientras se escuchaba desde un megáfono una voz que repetía una y otra vez: “Ollanta en primera vuelta”. Luego de unos minutos, la caravana enrumbó con dirección a Chancay, donde ya lo esperaban sus simpatizantes. Algunas mujeres le mostraban ollas de aluminio y de barro como muestra de respaldo. En la plaza de armas, Ollanta habló de temas que afectan e indignan a la población, como la jornada de las 8 horas diarias, la corrupción y el empleo.
Persecución y amenazas
El candidato de UPP denunció tener información de que agentes de Inteligencia, enviados por altos mandos militares, han ido al batallón de Infantería de Tingo María, donde prestó servicios, para averiguar sobre él. Dijo que amigos militares se lo han contado. Humala también denunció que observa a agentes de Inteligencia infiltrados en sus mítines, con grabadora en mano, para mantenerse informados de todos sus movimientos. También reiteró que él y su familia han sido amenazados de muerte.
Llamado a sus contrincantes
Ollanta Humala invocó a Lourdes Flores y Alan García para que no hagan una campaña “farandulera” ni de insultos. A Alan le reclamó por haber comparado a su familia con las barras bravas. Y a Lourdes le recomendó que aplique la palabra “serenidad” y se dedique a hacer su campaña tranquila.
Marcó distancias con el pronunciamiento que hizo su padre, Issac Humala, a favor de amnistiar a los cabecillas terroristas Abimael Guzmán y Víctor Polay. Dijo que las declaraciones de su padre están fuera de lugar. “Como padre lo respeto y lo quiero, es una persona lúcida, pero como político no comparto su declaración”, anotó. Agregó: “Mi padre no tiene ni tendrá ninguna influencia en el Partido Nacionalista ni en mi gobierno”. Luego, como otra veces, recordó que él estuvo en la zona de emergencia y vio el dolor.
Fuente: Diario La República de Lima


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