Contra las cuerdas en Irak

Los dos generales estadounidenses de más alta graduación a cargo de la guerra en Irak -Peter Pace, jefe del Estado Mayor, y John Abizaid, jefe del Mando Central con jurisdicción sobre Oriente Medio y Asia del Sur- acaban de admitir en el Senado de Estados Unidos que la inseguridad y la violencia sectaria en aquel país alcanzan cotas que sugieren a corto o medio plazo que pueda materializarse la peor de las hipótesis: la posibilidad de una guerra civil y/o un desmembramiento del país. El secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, en horas bajas desde hace ya muchos meses y sobre cuya eventual dimisión se habla de nuevo de cara a las elecciones legislativas de noviembre, no les enmendó la plana, ni siquiera intentó dibujar un panorama optimista. Un sombrío realismo caracterizó las intervenciones de los tres hombres ante unos senadores que expresa las inquietudes indisimulables de la opinión.

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