"Hoy el desafío no es tanto el optar por gobiernos de izquierda o de derecha (...) El dilema es si vamos a adaptarnos a mercados cada vez más rápidos y diversos, inversiones cada vez más globales, o vamos a volver a economías cerradas y centralmente planificadas, controladas por el gobierno a través de expropiaciones", considera el presidente Felipe Calderón. En entrevista con diario EL UNIVERSAL, el mandatario señala: "Estoy convencido de que México tiene que jugar un rol para sus propios ciudadanos, pero también para otros países del continente, que garantice que América Latina pueda llegar a tiempo a su cita con el futuro".
En el contexto de un choque de modelos económicos en la región que ha derivado en tensión entre su gobierno con otros como el venezolano o el boliviano, asegura:
"Es un falso dilema. A mí me parece que entre Estado y mercado debe existir un equilibrio. El mercado es condición necesaria para tener una economía competitiva, que es lo que necesitamos, pero insuficiente y, en consecuencia, se requiere la acción rectora del Estado para corregir las terribles desigualdades". "Estoy convencido de que tenemos que construir desde el centro, respetando las reglas del mercado, pero respetando también las reglas éticas de justicia y las del medio ambiente", añadió. Auguró que el país tiene todas las ventajas para transformarse en una de las cinco economías más grandes del mundo. "Tenemos recursos naturales, somos el cuarto productor de petróleo en el mundo y somos el quinto país con mayor biodiversidad, y tenemos una posición geográfica estratégica". Sobre su experiencia en Davos, asevera: "Me siento muy contento. Es un ambiente de enorme actualidad y no es esta mi primera vez. (...) El mundo ha cambiado dramáticamente. Ha cambiado la tecnología, el mercado, la política y el medio ambiente".
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