jueves, febrero 22, 2007

El presidente de Italia busca desde hoy un nuevo primer ministro tras la dimisión de Prodi

El presidente de la República, Giorgio Napolitano, inicia hoy las consultas con los líderes políticos para analizar los pasos a seguir tras la dimisión del primer ministro, Romano Prodi, ante el rechazo del Senado a su política exterior. Dirigentes de la coalición de Prodi, La Unión, aseguran que el ex primer ministro estaría dispuesto a formar un nuevo Gobierno siempre que sea fuerte y cuente con un amplio apoyo parlamentario. Napolitano le ha pedido a Prodi, de 67 años, que permanezca en el cargo hasta que haya una solución. Las consultas comenzarán a las 10.30, hora peninsular española, y se espera que concluyan en un máximo de dos días. En primer lugar, se entrevistará con los presidentes del Senado y la Cámara de Diputados, y después con los líderes de los partidos.

Los escenarios posibles son múltiples. Si Napolitano encuentra apoyo suficiente entre los partidos de centro-izquierda, podría volver a solicitar a Prodi la formación de Gobierno o bien pedir un voto de confianza que le retenga en el cargo. Sin embargo, si el apoyo no llega al nivel que Prodi desea, podría acudir a otro miembro de la coalición hasta ahora gobernante, como el ministro de Interior, Giuliano Amato. Finalmente, si no consigue llegar a ningún acuerdo, Napolitano podría disolver el Parlamento y convocar nuevas elecciones generales, aunque esta opción parece remota por el momento.



Prodi, en Roma tras su dimisión. (Foto: AFP)



La Unión busca de nuevo a Prodi

La caída del segundo Gobierno Prodi ha cogido desprevenida a su coalición, La Unión, que desde que el Senado rechazó la política exterior del Ejecutivo y provocó así que el primer ministro dimitiera. La coalición de centro izquierda no deja de preguntarse qué ha fallado y por qué, según fuentes de los partidos que la forman. Tras el anuncio de Prodi, los 16 partidos que forman La Unión han convocado a sus comités para analizar lo ocurrido y estudiar la respuesta que darán mañana al presidente de la República, Giorgio Napolitano, en las consultas para poner fin a la crisis. Los Democrátas de Izquierda —primer partido de la coalición y ex comunistas— han anunciado públicamente que pedirán a Napolitano que confiera a Prodi la formación de un nuevo ejecutivo. Piero Fassino, líder de los DS, hizo un llamamiento a los aliados para apoyar de nuevo a Prodi. El ex primer ministro ha mostrado su disposición a seguir al frente del Gobierno, pero ha insistido en que sólo lo hará con la coalición actual y siempre que ésta le garantice el apoyo total. En su línea de siempre, Prodi ha asegurado que no es un hombre para todas las estaciones y que no está dispuesto a seguir a cualquier precio.
La difícil disciplina de partido
El problema que se presenta es que, hasta el momento, no todos los partidos han logrado imponer la disciplina de grupo. Un inconveniente que ha provocado la dimisión de Prodi al no lograr la mayoría necesaria de 160 votos para sacar adelante una moción que pretendía respaldar la gestión del titular de Exteriores y viceprimer ministro, Massimo D'Alema. Prodi, según fuentes políticas, se ha mostrado muy enfadado con los líderes de los partidos de la izquierda radical (Refundación Comunista y Comunistas-verdes) por no lograr convencer a sus senadores para votar a su favor. En tal ambiente de incertidumbre, el centro-derecha de Berlusconi se ha mostrado cauto, a la espera de lo que decida el presidente Napolitano, pero ha expresado su oposición a un nuevo Gobierno Prodi. Por el momento, no descartan elecciones anticipadas.

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