El primer ministro italiano, Romano Prodi, ha afirmado hoy que su Gobierno ha salido reforzado de la reciente crisis que ha vivido porque "no hay margen para juegos", en una entrevista concedida a la emisora local Radio 24. "La mayoría está cohesionada porque ha comprendido que no hay margen para juegos", declaró el jefe del Ejecutivo, que hace diez días abrió una crisis cuando decidió presentar su dimisión tras perder una votación sobre política exterior en el Senado. "El Gobierno sale reforzado" de la crisis, opinó Prodi en la primera entrevista concedida tras cerrarse ayer ésta, después de obtener el voto de confianza del Congreso y del Senado.
El primer ministro también habló de la necesidad de reformar la ley electoral, una de sus principales propuestas para obtener la confianza de las Cámaras, ya que la considera en el origen de la crisis institucional que vive ahora Italia. "La ley electoral es sin duda el primer punto, pero no se debe cumplir por una parte sola: es necesario la ayuda de la oposición", explicó Prodi en un tono conciliador, como ya hiciera también ante el Congreso y el Senado.
Según un sondeo publicado hoy por el diario "La Repubblica", el 81 por ciento de los italianos estaría de acuerdo en la necesidad de cambiar esa ley electoral. En la entrevista con Radio 24, Prodi pidió tiempo también para poder cambiar el país y recordó que apenas lleva en el Gobierno desde mayo del año pasado. "Nueve meses bastan para que nazca un niño, no para 'cambiar Italia'. Denme tiempo", aseguró el primer ministro, que después indicó cómo ya podían sentirse los primeros signos de su política. Como ejemplo de esas señales de cambio citó el crecimiento de la economía italiana en un 1,9 por ciento durante 2006, más que en los cuatro años anteriores.
El primer ministro también habló de la necesidad de reformar la ley electoral, una de sus principales propuestas para obtener la confianza de las Cámaras, ya que la considera en el origen de la crisis institucional que vive ahora Italia. "La ley electoral es sin duda el primer punto, pero no se debe cumplir por una parte sola: es necesario la ayuda de la oposición", explicó Prodi en un tono conciliador, como ya hiciera también ante el Congreso y el Senado.
Según un sondeo publicado hoy por el diario "La Repubblica", el 81 por ciento de los italianos estaría de acuerdo en la necesidad de cambiar esa ley electoral. En la entrevista con Radio 24, Prodi pidió tiempo también para poder cambiar el país y recordó que apenas lleva en el Gobierno desde mayo del año pasado. "Nueve meses bastan para que nazca un niño, no para 'cambiar Italia'. Denme tiempo", aseguró el primer ministro, que después indicó cómo ya podían sentirse los primeros signos de su política. Como ejemplo de esas señales de cambio citó el crecimiento de la economía italiana en un 1,9 por ciento durante 2006, más que en los cuatro años anteriores.
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