Preocupa a empresarios brasileños reglas de Venezuela en el Mercosur

El gremio de los industriales brasileños pidió a congresistas y a la cancillería tomar ''precauciones'' en el proceso de adhesión de Venezuela al Mercosur porque aún no han sido definidas claramente sus obligaciones con el bloque, se informó ayer. Los industriales pidieron al Congreso postergar la aprobación del tratado de adhesión de Venezuela, hasta tanto concluya sus tareas el llamado Grupo de Trabajo, o el que desde julio del 2006, está encargado de definir los cronogramas y condiciones del ingreso de Caracas. Las preocupaciones de los industriales reunidos en la Confederación Nacional de Industrias (CNI) quedaron plasmadas en una carta y un documento de análisis enviado a la cancillería el 3 de mayo pasado y divulgados a la prensa en la jornada por la CNI en un correo electrónico. ''En la evaluación de la CNI el proceso de adhesión de nuevos miembros al Mercosur es una cuestión de la mayor relevancia por sus profundos impactos sobre la estrategia brasileña de inserción internacional ``, dijo la misiva a la cancillería. `Como la adhesión de Venezuela constituye la primera experiencia de expansión del Mercosur, es indispensable que sean adoptadas posiciones y algunas precauciones al proceso de adhesión'', añadió.

''En caso de que el Congreso apruebe el protocolo de adhesión antes de que estén completas las tareas del Grupo de Trabajo, Venezuela podrá ganar estatus de miembro pleno en el Mercosur, sin que estén definidas las condiciones para que aquel país cumpla con los compromisos de la unión aduanera'', agregó la CNI en su carta. La cancillería dijo que no comentaría las manifestaciones de la CNI. El Grupo de Trabajo debía concluir sus labores en marzo y después de ese mes presentó un informe que según la CNI ''dejó pendientes decisiones en temas de gran importancia'', entre ellos que no hay una lista de productos venezolanos que pasarán a tener la tarifa externa común o la TEC del Mercosur, de hasta 35 por ciento. La CNI quiere entonces detalles y precisiones sobre esas listas de productos, porque consideran que tal como está el protocolo, éste ``no representa una mejora sustantiva en las condiciones de acceso de los productos brasileños al mercado venezolano''. Con una corriente comercial bilateral de unos $4,100 millones, favorable a Brasil, compañías que exportan a Venezuela se han quejado por retrasos en recibir sus pagos, estando pendiente al menos $23 millones, debido al burocrático sistema de otorgamiento de dólares en la vecina nación, donde rige un control de cambio de divisas, según datos de Federación de Industrias del Estado de Sao Paulo (Fiesp).

Fuente: Diario El Nuevo Herald de Miami