Tras tres días de bloqueo, sin suministros energéticos y con las fronteras cerradas por Israel, la franja de Gaza, donde residen alrededor de 1,5 millones de palestinos, se ha quedado sin electricidad al interrumpir la única central eléctrica de la zona el suministro por falta de combustible, una vez agotadas sus reservas de fuel.
Israel impuso un férreo control del territorio palestino controlado por Hamas en represalia por el lanzamiento de cohetes artesanales contra su territorio. El intercambio de ataques por ambas partes ha acabado con la vida de un palestino al norte de la franja, según han confirmado las autoridades palestinas, que han añadido que el ataque estaba dirigido contra un grupo de militantes que fabricaba cohetes artesanales.
El director general de la planta eléctrica de Gaza ha confirmado el cierre total de las instalaciones, que producen 65 megavatios de los 200 que consumen los habitantes de la franja. El resto procede de Israel, que por ahora no ha cortada este suministro, y de Egi pto.
Fuente: Diario El Mundo de España
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