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El
presidente Hugo Chávez formalizó ayer ante el Consejo Nacional
Electoral su aspiración de gobernar a Venezuela hasta el 2019
(A.Acosta)
Cantando y bailando llegó el
presidente Hugo Chávez a la tarima dispuesta en la plaza Diego Ibarra
para que se dirigiera a sus seguidores, luego de inscribir su
candidatura a una tercera reelección.
"Gracias Cristo nuestro por esta vida, porque fue un año difícil el que concluyó y además hemos estado enfrentando la guerra psicológica del adversario, que si Chávez le quedan días de vida, que se está muriendo en La Habana, que no regresa, que buscan el sucesor (...) que Chávez está en silla de rueda, que no va a poder inscribir la candidatura y no sé cuánto diagnóstico necrofílico que echaron a rodar, (pero) aquí estoy, a nombre de ustedes, inscribiendo la candidatura para el ciclo 2013-2019", agregó Chávez, quien vestía una chaqueta tricolor y su acostumbrada boina roja, en un discurso que se extendió durante casi 3 horas y el cual culminó a las 8.40 pm.
El exvicepresidente José Vicente Rangel fue el encargado de presentar a Chávez en su aspiración a ser reelecto por tercera vez. " Hay que definir con quién se está, si con el socialismo o el capitalismo, con la transformación social o con el retroceso, con la IV ó con la V República", soltó quien además fue ministro de la Defensa y canciller.
Su hija Rosa Virginia se le acercó y Chávez aceleró sus palabras para dar fin al discurso. "Hemos venido de milagro en milagro, un día como ayer (pasado domingo) me operaban la primera vez (...) y un año después estoy aquí frente a ustedes (...) inscribiendo la candidatura. Como de milagro ha sido. Venimos de milagro en milagro y estoy seguro que con la ayuda de Dios seguiremos viviendo y seguiremos venciendo", dijo.
Antes el mandatario advirtió que apenas está "calentando los motores, mientras el majunchismo (oposición) está pistoneando". Subrayó que vencerá "por nocaut con 10 millones de votos para que respeten al pueblo".
Auguró que el chavismo seguirá invicto, "porque el 7 de octubre vamos a tener una nueva gran victoria popular, bolivariana y revolucionaria", pero les advirtió: "Hay que labrar la victoria, para ello es imprescindible la unidad, la verdadera unidad de los partidos políticos, los movimientos sociales, el Gran Polo Patriótico, el pueblo y sus distintos sectores", " No caigamos en triunfalismo. ¡Vamos a ganar, pero hay que labrar la victoria!", insistió, entre bromas con el público que le gritaba suegro, luego que presentara a su hija Rosinés, quien comentó aprendió a caminar en la campaña de 1998 y está por cumplir 15 años.
En varias oportunidades sin mencionarlo, se refirió al discurso del candidato de la opositora Mesa de la Unidad Democrática, Henrique Capriles, el cual calificó de "chayotismo". "Es inodoro, incoloro e insípido. El chayotismo que no sabe a nada, no huele a nada, no tiene color, el nihilismo, la nada", insistió, para luego asegurar que Capriles que el "proyecto del majunchismo es impresentable ante el pueblo y ellos tratan de disfrazarlo de una manera burda, ridícula incluso, mediante show, consignas , cancioncitas y bailecitos".
"Gracias Cristo nuestro por esta vida, porque fue un año difícil el que concluyó y además hemos estado enfrentando la guerra psicológica del adversario, que si Chávez le quedan días de vida, que se está muriendo en La Habana, que no regresa, que buscan el sucesor (...) que Chávez está en silla de rueda, que no va a poder inscribir la candidatura y no sé cuánto diagnóstico necrofílico que echaron a rodar, (pero) aquí estoy, a nombre de ustedes, inscribiendo la candidatura para el ciclo 2013-2019", agregó Chávez, quien vestía una chaqueta tricolor y su acostumbrada boina roja, en un discurso que se extendió durante casi 3 horas y el cual culminó a las 8.40 pm.
El exvicepresidente José Vicente Rangel fue el encargado de presentar a Chávez en su aspiración a ser reelecto por tercera vez. " Hay que definir con quién se está, si con el socialismo o el capitalismo, con la transformación social o con el retroceso, con la IV ó con la V República", soltó quien además fue ministro de la Defensa y canciller.
Su hija Rosa Virginia se le acercó y Chávez aceleró sus palabras para dar fin al discurso. "Hemos venido de milagro en milagro, un día como ayer (pasado domingo) me operaban la primera vez (...) y un año después estoy aquí frente a ustedes (...) inscribiendo la candidatura. Como de milagro ha sido. Venimos de milagro en milagro y estoy seguro que con la ayuda de Dios seguiremos viviendo y seguiremos venciendo", dijo.
Antes el mandatario advirtió que apenas está "calentando los motores, mientras el majunchismo (oposición) está pistoneando". Subrayó que vencerá "por nocaut con 10 millones de votos para que respeten al pueblo".
Auguró que el chavismo seguirá invicto, "porque el 7 de octubre vamos a tener una nueva gran victoria popular, bolivariana y revolucionaria", pero les advirtió: "Hay que labrar la victoria, para ello es imprescindible la unidad, la verdadera unidad de los partidos políticos, los movimientos sociales, el Gran Polo Patriótico, el pueblo y sus distintos sectores", " No caigamos en triunfalismo. ¡Vamos a ganar, pero hay que labrar la victoria!", insistió, entre bromas con el público que le gritaba suegro, luego que presentara a su hija Rosinés, quien comentó aprendió a caminar en la campaña de 1998 y está por cumplir 15 años.
En varias oportunidades sin mencionarlo, se refirió al discurso del candidato de la opositora Mesa de la Unidad Democrática, Henrique Capriles, el cual calificó de "chayotismo". "Es inodoro, incoloro e insípido. El chayotismo que no sabe a nada, no huele a nada, no tiene color, el nihilismo, la nada", insistió, para luego asegurar que Capriles que el "proyecto del majunchismo es impresentable ante el pueblo y ellos tratan de disfrazarlo de una manera burda, ridícula incluso, mediante show, consignas , cancioncitas y bailecitos".
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