Amazonas, Miranda y Lara fueron los únicos estados que se salvaron de la avalancha roja tras los comicios regionales de este 16 de diciembre. En estas entidades sus dirigentes reelectos se han abrazado al discurso progresista.
Esta corriente política agarró vuelo en Venezuela durante la campaña presidencial de Henrique Capriles Radonski, cuando se autodefinió como "progresista". Se originó en Europa a inicios del siglo XIX, según reseña en su blog "Tartufocracia" Aparicio Caicedo.
En Miranda sigue el progreso. Capriles es miembro fundador y líder del partido centro humanista Primero Justicia, aunque perdió el 7 de octubre, mantuvo la misma propuesta en la región; un gobierno de progreso.
En las presidenciales su tarjeta le aportó 279 mil 171 votos y para las regionales registró un crecimiento de 10 mil 479 sufragios, consolidándose sobre los partidos tradicionales como AD, Copei e incluso UNT.
Otro de los estados salvados por la campana fue Lara, donde Henri Falcón se alzó de nuevo con la gobernación. Solo su partido Avanzada Progresista le aportó 129 mil 349 votos. En esta entidad también quedaron desplazados AD, Copei y UNT.
El recién fundado partido Avanzada Progresista, nace de la separación de Podemos. En medio de la campaña presidencial alcanzando 256 mil 022 votos en todo el territorio nacional.
Amazonas también anda en una de progreso. Liborio Guarulla conquistó nuevamente la gobernación de la mano del Movimiento Progresista de Venezuela, partido que también nació durante la contienda anterior y su dirigencia viene de la separación del PPT tras dos años de conflictos internos. La tarjeta del MPV afianzó su liderazgo solo en la entidad indígena con 22 mil 350 votos.
Pese a que tiene menos de una año, en las elecciones nacionales quedó en entre los primeros 10 partidos y obtuvo 51 mil 976 votos.
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