En la declaración gubernamental que ha dirigido Angela Merkel al pleno del Parlamento alemán, la canciller cristianodemócrata ha agradecido públicamente a su ministro de Finanzas la defensa que ha hecho durante las últimas semanas de la semilla de las reivindicaciones alemanas en la negociación de la unión bancaria.
"Tendremos una separación clara entre la política monetaria del BCE y la función de supervisor y además el sistema se ocupará únicamente de los bancos relevantes, los que cuentan con una balanza por encima de los 30.000 millones de euros o que son un peso determinante en el PIB de su país", ha dicho triunfal, felicitándose indirectamente por haber conseguido finalmente que las cajas alemanas queden fuera de la supervisión bancaria común.
"Nunca nos alegraremos suficientemente por haber llegado a este acuerdo", ha dicho entre los aplausos de los diputados alemanes.
Sus declaraciones se producen después de que los ministros de Finanzas de la Unión Europea hayan logrado por fin cumplir con el mandato que les dieron los líderes europeos en la última cumbre y dejar cerrado el marco legislativo sobre el que se construirá el supervisor bancario único.
De este modo las pequeñas entidades financieras germanas, muchas de ellas de carácter público, se escaparán del ámbito de supervisión del BCE y seguirán siendo controladas por las autoridades nacionales.
Merkel, por lo demás, ha recordado que todos los esfuerzos presupuestarios que está haciendo Alemania para ayudar a los países del sur de Europa "sirven a sustentar el proyecto común del euro y sirven también directamente a sustentar los intereses de Alemania".
La canciller alemana ha expuesto que "vemos avances claros en los déficits de Irlanda, también en Portugal y España, y además también en Grecia", como argumento de que las reformas que se llevan a cabo en Europa van por el buen camino y dan ya sus primeros resultados.
Las ayudas a los bancos españoles que finalmente ven la luz han sido puestas como ejemplo, por parte de Merkel, del papel solidario que Alemania está jugando en esta crisis, al tiempo que ha pedido un avance en los procedimientos para detectar mejor y a tiempo los problemas en los sistemas bancarios, alarmas de solvencia y competitividad que sirvan para detectar de forma eficiente los problemas de la economía europea.
Fuente. DIARIO EL MUNDO DE ESPAÑA
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