miércoles, marzo 09, 2005

Mesa negoció, logró un acuerdo y fue ratificado por el Parlamento

Un año y cuatro meses después de haber asumido el cargo y haber gobernado sin respaldo político en el Congreso, el presidente Carlos Mesa fue ratificado ayer por votación unánime en el Parlamento, ante la sorprendida mirada de miles de personas en Bolivia y el mundo. La decisión parlamentaria, adoptada luego de una intensa negociación que tuvo como eje la propuesta presidencial de realizar modificaciones en la Ley de Hidrocarburos, dio inicio a una nueva etapa de relacionamiento entre el Gobierno y el Parlamento, en la que destaca el marginamiento del Movimiento Al Socialismo (MAS), hasta hace poco principal aliado de Carlos Mesa.

El acuerdo terminó además con la sensación de vacío de poder que había surgido en el país desde que el pasado domingo el Jefe de Estado había anunciado que renunciaría al cargo, decisión que ejecutó un día después. Los principales argumentos para su renuncia fueron la imposibilidad de gobernar bajo la presión de los bloqueos y las demandas sociales para que se apruebe una Ley de Hidrocarburos que "inviabilice el país". Mesa, que tras ser ratificado en el cargo aseguró que su renuncia "no fue una jugada política", había iniciado personalmente el acercamiento con el Poder Legislativo para negociar los términos de su ratificación, según confirmó ayer el presidente de la Cámara de Diputados, Mario Cossío. Eso ocurrió el lunes en la noche, cuando los jefes de bancada se encontraban reunidos analizando una respuesta a la renuncia presidencial. Mesa propuso enviar un emisario a esa reunión y, poco después, asistió el ministro de la Presidencia, José Galindo, quien puso en la mesa las condiciones del Presidente para quedarse en el cargo. Este encuentro continuó ayer, pero esta vez con la presencia del Jefe de Estado, quien consiguió que los representantes de seis de los ocho partidos con representación parlamentaria (excepto el MAS y el MIP) acepten firmar un compromiso para el cumplimiento de una agenda de cuatro puntos, en la que destaca el compromiso de aprobar a la brevedad una nueva Ley de Hidrocarburos que respete los resultados del referéndum del gas y las inversiones. El segundo punto compromete al Congreso a avanzar en la aprobación del referéndum autonómico, la elección de prefectos y la convocatoria a la Asamblea Constituyente. El tercero habla de un pacto nacional y el cuarto de iniciar gestiones para terminar con los bloqueos y las medidas de presión en el país. La firma de esta agenda de propósitos comunes abrió la puerta para que el Presidente sea ratificado y éste decida permanecer en el cargo hasta agosto del 2007, que es cuando termina su período constitucional.
Concluidas las negociaciones y una vez que el compromiso fue firmado por el Presidente y los legisladores, comenzó la sesión congresal que en 25 minutos terminó ratificando al Mandatario.
Carlos Mesa, que cruzó al Parlamento desde el Palacio en medio de un grupo numeroso de ciudadanos que hicieron vigilia para garantizar que no sea aceptada su renuncia, destacó la importancia de este acuerdo e invitó a todos los sectores del país a asumir una actitud de desprendimiento por la paz, como lo hicieron los parlamentarios.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

 
Libardo Buitrago / Blog © 2013 | Designed by RA