Nubarrones en el gobierno de Berlusconi

El ministro de Exteriores y líder de Alianza Nacional (AN), Gianfranco Fini, ha declarado a la salida de la reunión de la coalición gubernamental que su partido ha pedido al presidente Silvio Berlusconi que someta al Ejecutivo "a una votación de confianza". Mientras que la Unión de Demócratas Cristianos (UDC) se ha inclinado por una reorganización total del Ejecutivo para salir de la crisis tras la derrota electoral de las regionales del pasado 3 de abril. El líder de AN ha añadido que Berlusconi tiene que explicar "qué quiere hacer concretamente para el desarrollo del sur del país, para tutelar la renta de las familias y para favorecer la competitividad de las empresas". Fini ha exigido también que las reformas constitucionales que introducirán el federalismo en el país, apoyadas fuertemente por la Liga Norte, sean aprobadas de manera que si se tiene que llegar el referéndum para ratificarlas se haga sólo después de las elecciones generales de 2006. El ministro de AN y vicepresidente del Gobierno ha declarado "que no hay problema si Berlusconi quiere cambiar algún ministro, pero la gran novedad tienen que ser los contenidos políticos y no los ministros". El jefe del Ejecutivo italiano mantuvo estos últimos días algunas reuniones bilaterales con los partidos que forman parte de la coalición gubernamental para buscar una solución a la derrota electoral de las regionales y aceptar las peticiones de sus socios a fin de evitar tanto unas elecciones anticipadas como la crisis de Gobierno. Por ello, se habían lanzado como hipótesis la reorganización total de las carteras o la creación de dos nuevos Ministerios, para las áreas urbanas y para el sur del país. Por otra parte, el secretario general de UDC y segundo vicepresidente, Marco Follini, no ha querido comentar la reunión y ha aplazado sus declaraciones hasta este viernes, tras la reunión que mantendrá con los demás dirigentes del partido. No obstante, según fuentes cercanas al partido democristiano, el partido centrista estaría dispuesto a retirar a sus tres ministros del ejecutivo, lo que provocaría la inevitable crisis del Gobierno y la necesidad de reorganizar totalmente las carteras. En un documento firmado por el portavoz del partido UDC, Francesco D'Onofrio, se comenta que el grupo ha pedido "una crisis de gobierno controlada", es decir, que la "coalición actual debería llegar a un acuerdo sobre un programa de gobierno para el final de la legislatura, pero realizado con un nuevo Ejecutivo".
El UDC ha pedido, al igual que AN, que en este nuevo programa se haga un esfuerzo serio para tutelar a las familias, para el desarrollo económico del sur del país y para favorecer a las empresas italianas.