El dólar se dispara en Brasil por denuncias de corrupción contra el ministro de Economía

Antonio Palocci fue vinculado al pago de sobornos que realizó el gobernante Partido de los Trabajadores a legisladores de otras bancadas. Los mercados se desplomaron. La noticia cayó como una bomba en los mercados financieros de Brasil y provocaron que el dólar se disparara un 4,11 por ciento. El ministro de Economía, Antonio Palocci, fue vinculado hoy a los escándalos de corrupción del gobernante Partido de los Trabajadores (PT) por un ex asesor que lo acusó de recibir sobornos de empresas de recolección de basura. Las acusaciones fueron hechas por el abogado Rogerio Buratti, quien hoy declaró ante el Ministerio Público que Palocci recibía mensualmente 50.000 reales (unos 21.000 dólares de hoy) de empresas de recolección de basura del municipio de Ribeirao Preto, cuando fue alcalde de allí, informó el fiscal Sebastiao Sergio da Silveira. El dinero presuntamente era entregado después al PT, cuyo ex tesorero Delubio Soares admitió que tenía una contabilidad paralela para financiar sus campañas electorales y para pagar sobornos a legisladores de otras bancadas para asegurarse su fidelidad. Palocci fue alcalde de Ribeirao Preto, 319 kilómetros al noroeste de Sao Paulo, en dos ocasiones, entre 1993 y 1996, y entre 2001 y 2002, año en que dejó el cargo para encargarse del Ministerio de Economía tras la llegada al poder de Luiz Inácio Lula da Silva. Los sobornos habrían sido pagados durante el segundo período de Palocci al frente de la alcaldía, según la denuncia. Rogerio Buratti, que está detenido desde el pasado miércoles, acusado de lavado de dinero y de destruir pruebas en un proceso que se le sigue por extorsión a una empresa de loterías, fue secretario de Gobierno en la primera gestión de Palocci como alcalde, y previamente había sido asesor legislativo del ex jefe de Gabinete de ministros, José Dirceu, también vinculado a los escándalos del PT. Una de las empresas que según Buratti pagaba sobornos a Palocci es la Leao Leao, en la cual él trabajó como asesor tras retirarse de la alcaldía. El ex asesor de Palocci fue interrogado hoy en Ribeirao Preto tras acogerse al beneficio de "delación premiada", por lo que, en caso de ser condenado por los delitos que se le imputan, verá reducida la pena que reciba. La acusación de Buratti cayó como mal en el mercado financiero brasileño, donde el índice Ibovespa de la bolsa de Sao Paulo llegó a caer un 2,8 por ciento, mientras el dólar se disparó un 4,11 por ciento y alcanzó a cotizar a 2,478 reales para la venta, mientras el riesgo país de Brasil subía más del 3 por ciento. "Ese comportamiento muestra que el mercado está preocupado por una eventual inclusión de Lula y Palocci en las denuncias, y la cosa se pondrá grave si se comprueba algo", opinó el economista José Pío Borges, ex presidente del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES). El Ministerio de Economía divulgó un comunicado en el que Palocci "niega con vehemencia la veracidad de las informaciones" de Buratti, pero la declaración no fue suficiente para que los mercados recobrasen la calma. En tanto, la oposición calificó de "gravísimas" las acusaciones contra Palocci y advirtió que si son ciertas, el ministro tendrá que abandonar su cargo, una posibilidad que provoca escalofríos en los mercados, que lo ven como garante de la ortodoxa política económica de Lula. Para el senador Alvaro Dias, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), si Buratti presenta pruebas de sus acusaciones, "la situación del ministro dentro del gobierno puede resultar insostenible". "Las bolsas están en un pandemónium y la economía empieza a sentir más de cerca los impactos de la crisis política", manifestó el líder de la bancada del PSDB en el Senado, Arthur Virgilio Ribeiro Neto. Otro senador, José Jorge Vasconcelos Lima, del Partido del Frente Liberal (PFL), anunció que si antes de la próxima semana Palocci no da una "explicación convincente", pedirá que sea llamado a declarar ante una de las comisiones legislativas que investigan la corrupción en el país. Los mercados financieros del país habían resistido hasta ahora a la crisis política que atraviesa el PT y el Gobierno porque la avalancha de denuncias no tocaba directamente ni a Lula ni a Palocci, considerado por los inversores como garante de la continuidad de la política económica vigente. Pero según los analistas financieros, si las denuncias contra Palocci son confirmadas con pruebas, será prácticamente imposible evitar que la crisis política arrastre a la economía a un terreno negativo.