domingo, octubre 30, 2005

Bolivia merece una democracia mejor

Las ambiciones personales, los desencuentros regionales, la irracionalidad de dirigentes que no quieren aceptar la vigencia de las leyes y la Constitución, todo esto en medio de un tiempo de profundos cambios en el país, han llevado a la democracia boliviana, una vez más, al borde del abismo. La incapacidad de dirigentes de discernir y descubrir que las exigencias, los desplantes y los plazos fatales no tienen cabida cuando el Estado nacional está tratando de sobrevivir con fórmulas de gobiernos transitorios, ha rebasado todos los límites y está minando los cimientos del país. Los diputados representan a la población y si la población ha cambiado de residencia, no ha perdido el derecho a ser representada en el Parlamento. Esta verdad, que se refleja incluso en los cambios que se han dado desde 1825 en la composición del Parlamento, ha sido negada ahora por una corriente de dirigentes que están jugando con fuego. Pero el país sigue siendo mucho más grande que los problemas increíbles que algunos de sus políticos crean. Y ésta es la hora de esperar una solución que venga a salvar el proceso electoral y que deberá sacar a Bolivia de esta tan larga y perjudicial etapa de gobiernos temporales.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

 
Libardo Buitrago / Blog © 2013 | Designed by RA