LOPEZ OBRADOR Y CALDERON: ¿APUNTAN AL VOTO DEL PRI?

Los candidatos de la izquierda y la derecha a la presidencia de México en los comicios del próximo domingo, casi empatados en los sondeos, cerraron sus campañas implorando por el voto del otrora poderoso Partido Revolucionario Institucional (PRI), para que incline la balanza en las elecciones del domingo. Esta formación gobernó México durante 71 años —de 1929 a 2000— hasta perder ante el conservador Vicente Fox, del Partido Acción Nacional (PAN), quien se presentó como el candidato del cambio y consiguió votos de todos los partidos que le dieron un triunfo histórico. Años después de la derrota, el PRI comenzó a recuperar posiciones con un numerosos triunfos en elecciones regionales y legislativas, por lo que muchos analistas auguraban el retorno a la silla presidencial del candidato de esta formación, Roberto Madrazo, quien, sin embargo, nunca logró salir del tercer lugar en las encuestas. Tanto es así, que ahora sus posibles votantes se han transformado en botín electoral para el izquierdista Andrés Manuel López Obrador y el derechista Felipe Calderón. Los candidatos del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y del PAN insistieron en los últimos días de campaña en llamar a los electores del PRI a votar por ellos como únicas opciones con posibilidades reales de ganar. "Aprovecho para decirle a los priístas que no echen a perder su voto, que ya no le apuesten, ya no fustiguen a un caballo muerto", afirmó días atrás Calderón, candidato del partido de Fox. López Obrador, ex alcalde de Ciudad de México, ha atacado duramente a los empresarios y ha llamado a sus simpatizantes a convencer a más gente para ganar por un amplio margen. "Hay que convencer a los del PRI [...] y a los del PAN, a los de abajo", dijo el dirigente del PRD —favorito, según los últimos sondeos— en uno de los últimos mítines de la campaña que concluyó el miércoles.

Una poderosa maquinaria política

El PRI, con una poderosa maquinaria partidista en todo el país, así como con la mayor cantidad de gobernadores y parlamentarios, respondió que confía en su sólida estructura para ganar. "Los opositores quieren los 'votos útiles', pero no se los vamos a dar, porque el PRI no regala votos a un Gobierno que ha sido inútil para el país", afirmó Madrazo en su cierre de campaña en la capital refiriéndose a Calderón. Mas de 71 millones de mexicanos estan habilitados para votar en estas elecciones, aunque varios analistas aseguran que alrededor de 30 millones aún no han decidido por quién lo harán. Además, se prevé que otro vasto sector ni siquiera acuda a las urnas en un país con varios conflictos sociales aún abiertos. A grandes líneas, el norte industrial votaría por el PAN, el sur pobre e indígena por el PRI y la gigantesca Ciudad de México, con más de 18 millones de habitantes, se mantiene como feudo del PRD. Sin embargo, en 2000 la gente se volcó por Fox en las gigantescas reservas de votos del Estado de México, tradicional reducto del PRI, y Ciudad de México, donde la misma gente que votó al candidato del PAN para la Presidencia dio su sufragio a López Obrador para el Gobierno de la capital. En la contienda del próximo domingo también participan Patricia Mercado, de Alternativa Socialdemócrata y Campesina, y Roberto Campa, del Partido Nueva Alianza, organizaciones que se presentan por primera vez en unos comicios y que tendrán registro oficial si logran al menos un 2% de los votos. La investigadora Marcela Bobadilla, del centro Diseño Estratégico y Análisis Prospectivo, señaló que ese voto está más vinculado a las simpatías que conquiste cada candidato por programa o carisma que a una auténtica racionalización por parte del electorado.