El pedido que hizo el presidente Evo Morales a los constituyentes de su partido de recurrir a la mayoría absoluta para acelerar la aprobación del reglamento de la Asamblea Constituyente, ha generado críticas y ha puesto en alerta a los departamentos que se unieron para defender los dos tercios. El prefecto de La Paz, José Luis Paredes, cree que las declaraciones de Morales fueron parte de una reacción hormonal, como respuesta al maltrato que recibió la noche del viernes cuando asistió a la Sesión de Honor en el Concejo Municipal de Santa Cruz. "Lastimosamente así reacciona nuestro Presidente, más por emoción que por meditación", dijo.
Paredes indicó que está dispuesto a sumarse a cualquier movimiento que generen otros departamentos para defender los dos tercios, porque es un tema de interés nacional. "De aprobarse un reglamento a la fuerza, con simple mayoría absoluta, estaríamos frente a un atentado serio al proceso democrático", señaló.
El constituyente Gamal Serhan, de Poder Democrático y Social (Podemos), dijo que asumirán todas las medidas posibles para evitar la mayoría absoluta, no descarta incluso el abandono de la Asamblea de parte de su bancada. "Depende de que prospere o no la imposición del Movimiento Al Socialismo (MAS), pero será la última salida, habrá instancias intermedias, es decir, declarar huelga de hambre, apelar a las instancias jurídicas para declarar la nulidad o recurrir a organismos internacionales", dijo. Serhan, quien advirtió que agotarán todas las etapas, "pero al final, si tenemos que salir, vamos a hacerlo, quedarnos allí sería ser cómplices de este atentado".
Confrontación
Alberto Melgar, presidente del Comité Cívico de Beni, dijo que el Mandatario de la Nación está induciendo a la confrontación. Sin embargo, recordó que ocho comités cívicos departamentales, a excepción de Potosí, están decididos a defender los dos tercios. Adelantó que sostendrán una reunión en el transcurso de esta semana para tomar una decisión. "Van a venir medidas más radicales, eso lo vamos a decidir de manera conjunta", destacó. El prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas, resaltó que esta reacción del Presidente forma parte de los cambios constantes que hace de las reglas del juego. "La ley no se discute ni se la cambia a gusto, al sabor y a las necesidades que pueda tener para hacer política de un gobierno, o para intereses que no están claros", sostuvo. Por su parte, Alberto Aguilar, prefecto de Oruro, señaló que se está buscando una alternativa mixta que implica tener mayoría absoluta para que se aprueben los artículos y cerrar la Constitución con dos tercios para su aprobación.
En tanto, el presidente del Comité pro Santa Cruz, Germán Antelo, advirtió que la actuación de Evo Morales pone en evidencia, una vez más, la injerencia directa del Ejecutivo en la Asamblea. Adelantó que estarán a la expectativa de lo que suceda esta semana, para encarar una estrategia de lucha a escala nacional. El presidente de los consejeros departamentales, Juan Baltazar, dijo que los partidos políticos deben dejar trabajar a los asambleístas. Gabriel Helbing, diputado de Podemos, calificó como un atropello el pedido del Presidente y como una provocación al conflicto. Para el vocero constituyente de Podemos, José Antonio Aruquipa, el MAS lleva a la Asamblea Constituyente al terreno de la ilegalidad y la irracionalidad, al disponer la aprobación por mayoría absoluta el texto constitucional. Advirtió que, de concretarse la determinación masista, la Asamblea puede invalidar todo el trabajo por demasiados visos de nulidad. Podemos no teme quedar aislado en la Asamblea ante la posibilidad de un eventual acuerdo entre el MAS-UN-MNR para impulsar el funcionamiento de la Constituyente con los dos tercios.
Denuncian interferencia
El Movimiento Al Socialismo (MAS) desconoce la representación y autoridad de las prefecturas para proponer y presionar por la fórmula de dos tercios artículo por artículo en la Asamblea Constituyente y no por mayoría absoluta. El constituyente Raúl Prada dijo que el reciente pronunciamiento de las prefecturas no masistas por los dos tercios emitido en la ciudad de Cochabamba y Tarija, "es una interferencia a la Asamblea" que está sobre todo poder extraordinario. No opinó lo mismo sobre la determinación de la cumbre de movimientos sociales que dio plazo fatal a la Asamblea para que apruebe el reglamento de debates. Prada explicó que Morales actúa no como Presidente de la República sino como el jefe de un instrumento político, representante de los cocaleros y organizaciones sociales sobre la conducción de la Asamblea y "en ese mecanismo no hay interferencia". El criterio de Prada contradice la acción del presidente del Congreso, Álvaro García Linera, que el pasado 19 de octubre recibió en Palacio Quemado a los nueve prefectos y firmó una declaración de cinco puntos que sentó las bases de un entendimiento, destinadas a destrabar la Asamblea.
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