Chávez congela relaciones con España y Colombia

El presidente Hugo Chávez puso en revisión las relaciones bilaterales con Colombia, luego de que Bogotá haya decidido retirar su mediación y la facilitación de la senadora Piedad Córdoba, en el proceso de canje humanitario. "Declaro al mundo que las relaciones con Colombia las meto en un congelador, no creo en nadie en el gobierno de Colombia", dijo Chávez. Aprovechó en envión para también anunciar que las relaciones con España seguirán suspendidas "hasta que el rey de España no se disculpe".

El mandatario venezolano aseguró haber perdido "toda la confianza" en el presidente Uribe a quien en más de una oportunidad llamó mentiroso. "Han emitido un comunicado ayer (sábado) cargado de mentiras y eso es grave cuando un gobierno miente. Lanzaron un escupitazo brutal en nuestro rostro, que le pusimos el alma para tratar de buscar el camino a la paz", añadió. El jefe de Estado venezolano lamentó que el gobierno colombiano no sólo haya suspendido el proceso de mediación que Chávez venía emprendiendo, sino también el "el cinismo" con el que considera fue tratado. Subrayó "la falta de respeto del presidente Uribe". "Ud. no habla claro, manda a que otros hablen por Ud. Está mintiendo de manera descarada, fea, horrible, Colombia merece otro presidente, uno que sea digno", dijo.

Afirmó que tomando una excusa (un contacto telefónico fortuito con un alto jefe militar colombiano) para excluirlo del proceso. "Lo presionan mucho los gringos, la oligarquía y los militares colombianos". Afirmó que la mediación "venía avanzando, teníamos una fórmula para lograr el acuerdo humanitario, estoy muy seguro de que lo íbamos a lograr", y comentó que había "medio mundo apoyándonos". "Espero que Uribe no llegue hasta ahí, a que Colombia sea utilizada contra Venezuela", advirtió.

¿Parar la bicicleta?
En cuanto a tema nacional, el presidente volvió a repetir por segunda vez en menos de una semana un escenario probable que está considerando en caso de que se imponga el No en el referéndum para la reforma de la Constitución que se celebrará el próximo domingo. Poco amigo de hablar de derrotas y luego de haber obtenido al menos ocho seguidas durante los ocho años que tiene en el poder, el mandatario venezolano advirtió en un acto en Zulia que en el "supuesto negado de que no se aprobara, la revolución pudiera entrar en una fase de dificultades, y pudiera ser sujeto o víctima de un proceso de disminución de velocidad". Blandiendo en la mano derecha un ejemplar del proyecto de reforma al que hace llamar la "Roja, rojita", Chávez subrayó ante los suyos que "uno de los elementos que está en juego es la velocidad del proceso". "Yo quisiera ir mucho más rápido, es necesario acelerar la marcha. Aquí está parte de la fórmula", dijo en tono serio. De nuevo volvió a personalizar la propuesta al exhortar a sus seguidores a no pararse en los artículos. "Mucho más allá de aquel artículo, tal o cual, hay que atender al conjunto", dijo para impulsar la transformación política, social, económica y cultural del proceso revolucionario que ha planteado. Insistió en la posibilidad de que quienes adversan su propuesta reformista, terminen ganando en la medición de fuerzas del próximo domingo. "Yo estoy seguro de que entraremos en una fase de peligrosa desaceleración que pudiera llevarla (a la revolución) a velocidad cero. Y como la bicicleta habría que poner el pie en tierra para que no se caiga", expresó.

Fuente: Diario El Nacional de Caracas