El presidente Evo Morales volvió anoche a retar a los prefectos opositores a su gobierno a someterse, junto a él, a un referéndum de revocatoria de mandato para que " el pueblo decida si respalda o no esta etapa de cambios" y así evitar más muertes, resultado de la creciente confrontación que vive el país por el tema de la Asamblea Constituyente y el recorte de los recursos a las prefecturas. Las respuestas al desafío no se dejaron esperar, los opositores la consideraron una "bomba de humo" para desviar la atención de los problemas fondos. Casi con los mismos términos y en medio de graves conflictos, tras los violentos enfrentamientos ocurridos en Cochabamba entre campesinos y citadinos, con el saldo de cuatro muertos, el 11 de enero pasado, el Primer Mandatario hizo el mismo desafío a los prefectos como una salida a la crisis institucional que se vivía en el país en ese momento.
El desafió, en ese entonces, fue aceptado por los seis prefectos opositores. Y tal como anunció ayer en su mensaje, en esa oportunidad el presidente anunció que a la brevedad el Ejecutivo enviaría al Congreso un proyecto de ley para instituir la revocatoria de mandato por voto popular. El proyecto fue enviado al Congreso, pero no prosperó y a la propuesta no ha sido tratada hasta la fecha. Esta nueva propuesta fue hecha mientras crece el número de huelguistas de hambre contra el Gobierno en cuatro de las nueve regiones del país. Morales aseguró anoche que hoy -jueves- enviará al Congreso Nacional la propuesta de ley que contiene el sometimiento de su mandato a una consulta popular a efectuarse "rápidamente". "Si son demócratas (los prefectos opositores) apostemos por la democracia. Yo y los nueve prefectos nos sometamos a un referéndum revocatorio. Si el pueblo dice que me vaya, no tengo ningún problema; que el pueblo diga quién se va y quién se queda", señaló en un mensaje que da un viraje a la posición que hasta anoche mantenía el gobierno. "No se trata de ir a quejarse afuera sino de someternos a la voluntad del pueblo", dijo en alusión a cuatro prefectos que emprendieron una denuncia internacional ante la Organización de los Estados Americanos y las Naciones Unidas en contra del gobernante, al que acusan de promover acciones antidemocráticas y de buscar perpetuarse en el poder. La semana pasada los prefectos de Cochabamba y Santa Cruz desafiaron a Morales a convocar a una consulta nacional para revocar o ratificar sus mandatos tras unas protestas en torno a la Asamblea Constituyente.
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