En caso de que los efectos del “Sandy” provoquen destrozos que dificulten el normal desarrollo de las elecciones estadounidenses del próximo martes, su celebración podría quedar aplazada, al menos en aquellos estados donde el voto no pueda efectuarse convenientemente. La posibilidad ha sido sugerida por la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA por su siglas en inglés). “El impacto de la tormenta podría extenderse a la próxima semana y eso a su vez podría tener impacto sobre las elecciones”, dijo este lunes Craig Fugate, administrador de la Agencia.
Fugate indicó que la FEMA únicamente hace valoraciones de lasituaciones catastróficas y que corresponde a las autoridades políticas determinar si deden tomarse medidas en relación a la jornada electoral. Altos cargos federales han asegurado que corresponde a cada uno de los estados pronunciarse al respecto, ante lo que parece un vacío legal.
El Congreso de Estados Unidos solamente ha regulado rechazar que actos terroristas obliguen a posponer unas elecciones. Los atentados del 11-S de 2001 obligaron a retrasar unas eleccione primarias para la alcaldía de Nueva York. Poco después, la Cámara de Representantes aprobó con gran mayoría una solución que declaraba que “las acciones de terroristas nunca harán retrasar la fecha de ninguna elección presidencial”. Los legisladores también establecieron que “ninguna persona o agencia de modo individual debería tener la autoridad de retrasar la fecha” de las presidenciales.
Fuente. DIARIO ABC DE ESPAÑA
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