El secretario general de la ONU, Kofi Annan, pedirá llegar a un acuerdo para ampliar el Consejo de Seguridad antes de septiembre próximo y crear un nuevo Consejo de Derechos Humanos para reemplazar a la actual Comisión de Ginebra. Ambos puntos figuran en un informe que Annan presentará este lunes a la Asamblea General.
En él, Annan perfila las reformas que necesita la ONU para adaptarse a la nueva realidad y los desafíos del mundo, así como para alcanzar los objetivos de desarrollo fijados para el año 2015.
La propuesta de Annan no entra en cuál de las dos opciones presentadas para la ampliación del Consejo de Seguridad se debería adoptar y deja a los Estados miembros de la ONU esta decisión.
El texto es el resultado de años de debate y, sobre todo, de las recomendaciones formuladas por un grupo de personalidades y de un informe realizado por un equipo de economistas sobre cómo cumplir los objetivos de desarrollo que los países miembros se fijaron en la cumbre de 2000.
Según explicó el jefe de gabinete de Annan, Mark Malloch Brown, el secretario general presentará las propuestas como "un paquete" y que se parta del principio de que "el estatus quo no es aceptable" y que la falta de consenso no debe suponer "la inacción".
La reforma que propone afecta al funcionamiento y los organismos de la ONU, incluidos la Asamblea General, el Consejo de Seguridad, el Consejo Económico y Social y el Secretariado.
Para todos ellos, Annan contempla diferentes medidas a fin de fortalecerlas, agilizar su funcionamiento, hacerlos más eficaces y dar mayor transparencia a sus procedimientos.
La reforma del Consejo de Seguridad.
En él, Annan perfila las reformas que necesita la ONU para adaptarse a la nueva realidad y los desafíos del mundo, así como para alcanzar los objetivos de desarrollo fijados para el año 2015.
La propuesta de Annan no entra en cuál de las dos opciones presentadas para la ampliación del Consejo de Seguridad se debería adoptar y deja a los Estados miembros de la ONU esta decisión.
El texto es el resultado de años de debate y, sobre todo, de las recomendaciones formuladas por un grupo de personalidades y de un informe realizado por un equipo de economistas sobre cómo cumplir los objetivos de desarrollo que los países miembros se fijaron en la cumbre de 2000.
Según explicó el jefe de gabinete de Annan, Mark Malloch Brown, el secretario general presentará las propuestas como "un paquete" y que se parta del principio de que "el estatus quo no es aceptable" y que la falta de consenso no debe suponer "la inacción".
La reforma que propone afecta al funcionamiento y los organismos de la ONU, incluidos la Asamblea General, el Consejo de Seguridad, el Consejo Económico y Social y el Secretariado.
Para todos ellos, Annan contempla diferentes medidas a fin de fortalecerlas, agilizar su funcionamiento, hacerlos más eficaces y dar mayor transparencia a sus procedimientos.
La reforma del Consejo de Seguridad.
En el caso del Consejo de Seguridad, un escollo que ha tenido atascada la reforma más de diez años, insta a los Estados miembros a que consideren las dos opciones de ampliación que ofreció el grupo de estudio para aumentar a 24 el número de miembros, que ahora es de 15, de los cuales cinco son permanentes. La primera alternativa consiste en la incorporación de seis nuevos países de manera permanente, pero sin derecho a veto, así como de tres nuevos no permanentes.
La segunda opción sería crear los llamados miembros "semipermanentes", que podrían permanecer en el Consejo cuatro años renovables, y un puesto "no permanente". Respecto a la Comisión de Derechos Humanos, Annan dice que sufre un descenso de credibilidad y profesionalismo, por lo que necesita una reforma profunda que podría consistir en su sustitución por un organismo más pequeño, en la forma de un Consejo, cuyos miembros serían elegidos directamente por la Asamblea General, con mayorías de dos tercios.
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