viernes, julio 28, 2006

El Gobierno libanés acuerda solicitar el envío de tropas de la ONU al sur del país

Los ataques israelíes continúan en el sur y este del Líbano, con un recuento de tres muertos y varios heridos, mientras el Gobierno libanés intenta superar sus diferencias y mostrarse unido entorno a su primer ministro, Fuad Siniora. Los cazabombarderos israelíes han descargado sus proyectiles contra las regiones sureñas de Nabatiye y Tiro, así como en el este del país, según fuentes policiales y medios locales. En la última región, y en concreto en la localidad de Yabur, tres personas murieron y varias más resultaron heridas por los bombardeos israelíes de esta mañana. En el sur de Nabatiye fueron numerosos los pueblos atacados, pero debido a que la mayoría ya están despoblados, sólo hubo cinco heridos. Hizbulá respondió con disparos de 'katiushas' al norte de Israel, en las regiones de Akka y Rudina, sin que se sepa si hay víctimas. Asimismo, continúan los intensos combates alrededor de la localidad meridional de Bint Yebeil, que los israelíes tratan de tomar desde el domingo, después de haberse hecho con el control de la estratégica colina de Marún el Ras, también en el sur. A primeras horas, los aviones israelíes realizaron decenas de ataques contra Kila Dalafa, una región situada entre el valle de la Bekaa y el sur del país, zonas consideradas feudos de Hizbulá.

Plan del Gobierno libanés

El Gobierno libanés aprobó anoche por unanimidad el plan presentado por el primer ministro Fuad Siniora en la conferencia de Roma, mientras continúa la guerra no declarada entre Israel y Líbano, que ya se ha cobrado la vida de unos 600 libaneses. Después de varias horas de debates, por momentos tumultuosos, el gabinete aprobó el proyecto de Siniora, que consta de siete puntos y que había sido previamente rechazado por el grupo chií Hizbulá. Dicho plan prevé "el refuerzo en número, material militar, mandato y perímetro de las operaciones de las fuerzas internacionales de la ONU que operan en el sur del Líbano, así como la necesidad de emprender un trabajo humanitario urgente y operaciones de ayuda". Los ministros del Hizbulá y el presidente Emile Lahud defendían la idea de una fuerza de observación, una especie de segunda Fuerza Provisional de Naciones Unidas para el Líbano (FPNUL) que no estuviera dotada de poder coercitivo. Pero Siniora amenazó con interrumpir las negociaciones en favor de un alto el fuego, mientras que los ministros de "las fuerzas del 14 de marzo", coalición anti-siria, responsabilizaron a Hizbulá de haber llevado al país a una guerra y subrayaron que ha llegado la hora de dejar al primer ministro la iniciativa para acabar con ella, según la prensa local. "La gestión de las negociaciones para alcanzar soluciones es de una importancia primordial para garantizar el éxito o el fracaso del Líbano y lo esencial es tener una visión clara, que haya un acuerdo nacional y la confianza entre todos", afirmó el ministro de Información, Ghazi Aridi, al término de la reunión. El Gobierno agradeció a todos los países que están ayudando al Líbano para poner fin al drama humanitario. El ministro de Sanidad, Mohamad Jalife, advirtió que una nueva tragedia podría agregarse a la que está viviendo la población debido a que pueden aparecer epidemias como el tifus y la hepatitis, por falta de agua, higiene y por los cadáveres que aun están bajo los escombros, que ayer calculó que podrían ser entre 150 y 200. En una declaración a la radio 'La Voz del Líbano', el ministro agregó, sin embargo, que "no podremos hacer frente indefinidamente a esta situación", pues según sus estimaciones los medicamentos pueden alcanzar sólo para un mes.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

 
Libardo Buitrago / Blog © 2013 | Designed by RA