Las ventas minoristas cayeron en marzo a medida que la pérdida de empleos y las dificultades para acceder al crédito volvieron más cautelosos a los consumidores estadounidenses, moderando las esperanzas de una pronta recuperación económica.
Luego de una leve mejoría este año con respecto a finales del año pasado, las ventas minoristas cayeron 1,1% en marzo respecto al mes anterior, anunció el martes el Departamento de Comercio. Aunque los problemas de crédito golpearon a las ventas de autos con particular fuerza, los declives se registraron en la mayoría de las categorías principales, desde electrodomésticos a muebles y vestuario. Las ventas minoristas totales descendieron 11% respecto a marzo del año pasado.
El principal mensaje es que el gasto de los consumidores, que representa el 70% de la actividad económica en EE.UU., probablemente no repuntará rápidamente. Los consumidores, afectados por la debilidad del mercado laboral y el pronunciado declive del patrimonio inmobiliario, mantienen la cautela.
El reporte de ventas minoristas inyectó una dosis de realismo tras varias semanas marcadas por la esperanza de que la recesión estuviera cerca de tocar fondo. El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, calificó en un discurso pronunciado ayer a los recientes informes de ventas y construcción de viviendas, gasto de los consumidores, incluyendo ventas de nuevos vehículos, como "signos tentativos de que el pronunciado declive de actividad económica podría estarse moderando". Bernanke advirtió, sin embargo: "No tendremos una recuperación sostenible sin una estabilización de nuestro sistema financiero y mercados de crédito".
En otro discurso, el presidente Barack Obama destacó la mejora en los mercados de autopartes y préstamos estudiantiles debido a los esfuerzos del gobierno y dijo que "desde donde estamos, por primera vez, estamos empezando a ver un atisbo de esperanza". El mandatario insistió, en todo caso, que aún queda un largo camino por recorrer. "La severidad de esta recesión causará más pérdidas de empleo, más embargos hipotecarios y más dolor antes de que termine", dijo.Se espera que la tasa de desempleo, que se ubicó en 8,6% en marzo, se aproxime y tal vez supere el 10% para finales de año. Los consumidores, que han visto cómo la caída de los mercados inmobiliario y bursátil evapora su patrimonio, probablemente seguirán acaparando efectivo para apuntalar sus ahorros.
Siga leyendo el artículo del diario The Wall Street Journal Américas, publicado en el diario La Nación de Buenos Aires
Luego de una leve mejoría este año con respecto a finales del año pasado, las ventas minoristas cayeron 1,1% en marzo respecto al mes anterior, anunció el martes el Departamento de Comercio. Aunque los problemas de crédito golpearon a las ventas de autos con particular fuerza, los declives se registraron en la mayoría de las categorías principales, desde electrodomésticos a muebles y vestuario. Las ventas minoristas totales descendieron 11% respecto a marzo del año pasado.
El principal mensaje es que el gasto de los consumidores, que representa el 70% de la actividad económica en EE.UU., probablemente no repuntará rápidamente. Los consumidores, afectados por la debilidad del mercado laboral y el pronunciado declive del patrimonio inmobiliario, mantienen la cautela.
El reporte de ventas minoristas inyectó una dosis de realismo tras varias semanas marcadas por la esperanza de que la recesión estuviera cerca de tocar fondo. El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, calificó en un discurso pronunciado ayer a los recientes informes de ventas y construcción de viviendas, gasto de los consumidores, incluyendo ventas de nuevos vehículos, como "signos tentativos de que el pronunciado declive de actividad económica podría estarse moderando". Bernanke advirtió, sin embargo: "No tendremos una recuperación sostenible sin una estabilización de nuestro sistema financiero y mercados de crédito".
En otro discurso, el presidente Barack Obama destacó la mejora en los mercados de autopartes y préstamos estudiantiles debido a los esfuerzos del gobierno y dijo que "desde donde estamos, por primera vez, estamos empezando a ver un atisbo de esperanza". El mandatario insistió, en todo caso, que aún queda un largo camino por recorrer. "La severidad de esta recesión causará más pérdidas de empleo, más embargos hipotecarios y más dolor antes de que termine", dijo.Se espera que la tasa de desempleo, que se ubicó en 8,6% en marzo, se aproxime y tal vez supere el 10% para finales de año. Los consumidores, que han visto cómo la caída de los mercados inmobiliario y bursátil evapora su patrimonio, probablemente seguirán acaparando efectivo para apuntalar sus ahorros.
Siga leyendo el artículo del diario The Wall Street Journal Américas, publicado en el diario La Nación de Buenos Aires
No hay comentarios.:
Publicar un comentario