El presidente Evo Morales ubicó ayer a su homólogo peruano Alan García entre “los peores presidentes del mundo”, tras denunciar, en clara alusión a Perú, que quienes promueven los tratados de libre comercio son cultores de la “muerte” y del “genocidio”. El nuevo ataque a la administración de García se produjo durante los actos del 133 aniversario de la población de Totora, en Cochabamba, donde el Jefe de Estado ratificó que no pedirá disculpas a Perú por haber calificado como un genocidio el enfrentamiento del 5 de junio en la población de Bagua. Dijo que no tiene por qué pedir perdón por criticar a los impulsores del sistema capitalista, a quienes considera “los peores presidentes del mundo (...) si no es George Bush en Estados Unidos, ahora (es) Alan García”.
En su declaración, transmitida por la oficial Radio Patria Nueva, señaló que si de pedir perdón se trata, García debería hacerlo, tanto de la población de su país como de la boliviana, por haber asilado a tres ministros del gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, acusados por el delito de genocidio. "Alan García debería pedir perdón a ese pueblo (de La Paz y El Alto) masacrado por Gonzalo Sánchez de Lozada y sus ministros", dijo al referirse al caso boliviano. Sobre el caso peruano, apuntó que: "pierden tiempo algunos ministros (de ese país). El que tiene que pedir perdón al pueblo peruano es Alan García". Con ello se refirió al canciller peruano, José García Belaúnde, quien pidió a Morales disculparse de Perú por haber hablado de genocidio, cuando la propia ONU definió que no se presentó esta figura en el caso de Bagua.
Luego, en clara alusión a Perú, dijo que "nosotros no somos de la cultura de la muerte, no somos del TLC, tratados de libre comercio, esas son las diferencias entre los presidentes de los gobiernos de la región andina”. "El Tratado de Libre Comercio no solamente es la cultura de la muerte, sino (que) estas políticas económicos mediante el tratado del libre comercio pues aplican políticas de genocidio, genocidio contra la humanidad, y no es posible que algunos traten de camuflar sus políticas echándole la culpa a Evo Morales", agregó. El gobierno de García denunció que en el conflicto de Bagua hubo intromisión de Morales, con una carta enviada a los indígenas llamando a la revolución. El canciller, David Choquehuanca, también descartó el pedido peruano de disculpas presidenciales. "No vamos a aceptar ningún condicionamiento, nosotros queremos construir relaciones de hermandad; tenemos relaciones de hermandad con el Perú, y las autoridades tenemos que trabajar en el fortalecimiento de estas relaciones", afirmó. Dijo que el repliegue del embajador peruano, Fernando Rojas, no contribuye al objetivo de reencaminar las relaciones. En el caso boliviano, señaló que "no es necesario" llamar al embajador Franz Solano.
Fuente: Diario La Razón de Bolivia
En su declaración, transmitida por la oficial Radio Patria Nueva, señaló que si de pedir perdón se trata, García debería hacerlo, tanto de la población de su país como de la boliviana, por haber asilado a tres ministros del gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, acusados por el delito de genocidio. "Alan García debería pedir perdón a ese pueblo (de La Paz y El Alto) masacrado por Gonzalo Sánchez de Lozada y sus ministros", dijo al referirse al caso boliviano. Sobre el caso peruano, apuntó que: "pierden tiempo algunos ministros (de ese país). El que tiene que pedir perdón al pueblo peruano es Alan García". Con ello se refirió al canciller peruano, José García Belaúnde, quien pidió a Morales disculparse de Perú por haber hablado de genocidio, cuando la propia ONU definió que no se presentó esta figura en el caso de Bagua.
Luego, en clara alusión a Perú, dijo que "nosotros no somos de la cultura de la muerte, no somos del TLC, tratados de libre comercio, esas son las diferencias entre los presidentes de los gobiernos de la región andina”. "El Tratado de Libre Comercio no solamente es la cultura de la muerte, sino (que) estas políticas económicos mediante el tratado del libre comercio pues aplican políticas de genocidio, genocidio contra la humanidad, y no es posible que algunos traten de camuflar sus políticas echándole la culpa a Evo Morales", agregó. El gobierno de García denunció que en el conflicto de Bagua hubo intromisión de Morales, con una carta enviada a los indígenas llamando a la revolución. El canciller, David Choquehuanca, también descartó el pedido peruano de disculpas presidenciales. "No vamos a aceptar ningún condicionamiento, nosotros queremos construir relaciones de hermandad; tenemos relaciones de hermandad con el Perú, y las autoridades tenemos que trabajar en el fortalecimiento de estas relaciones", afirmó. Dijo que el repliegue del embajador peruano, Fernando Rojas, no contribuye al objetivo de reencaminar las relaciones. En el caso boliviano, señaló que "no es necesario" llamar al embajador Franz Solano.
Fuente: Diario La Razón de Bolivia
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