miércoles, noviembre 24, 2010

Un escenario imprevisible

El choque de hoy entre las dos Coreas es un capítulo más de una escalada de final imprevisible que comenzó a escribirse en marzo pasado, cuando una corbeta militar surcoreana fue hundida por un buque de guerra del otro lado con el saldo de 46 marines muertos.

El siguiente paso fue la estentórea exhibición global del avance en los laboratorios nucleares en manos de la extravagante dictadura feudal comunista de Pyongyang que garantizarían el debut de un arsenal atómico mucho más temible de los que se suponía. Pero el hecho de mayor relevancia que se debería tener en cuenta, es que todo esto rodea el inminente debut en el poder de Kim Jong Un, el hijo del actual déspota norcoreano King Jong Il quien parece haber decidido darle una impronta militar y guerrerista a la transición.

Corea del Norte es un país con el que conviene eludir las visiones sencillas. La dictadura en ese país la creo el padre de la dinastía, Kim il-Sung, un mesiánico quien tras su muerte es considerado el padre de la patria y presidente vitalicio de ese empobrecido país que mantiene una crítica alianza con China. Pyongyang ha mantenido históricamente un esquema de comportamientos agresivos y amenazas como elemento extorsivo para obtener alimentos y energía. Durante el gobierno de George Bush, se suspendió esa asistencia que había prometido su antecesor Bill Clinton al comprobarse que Corea del Norte siguió secretamente su investigación nuclear

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

 
Libardo Buitrago / Blog © 2013 | Designed by RA