En medio de la creciente tensión por el desmoronamiento del régimen de Muammar Khadafy, los rebeldes continúan avanzando sobre la capital Tripoli y preparan el asalto final contra el líder libio, cuyo paradero sigue siendo un misterio.
Anoche, con ayuda de la OTAN, las fuerzas opositoras al régimen lanzaban una ofensiva contra el complejo en Bab Al Aziziya, el búnker donde se encontraría Khadafy, según fuentes diplomáticas.
Tras la violenta jornada de ayer, los insurgentes se enfrentaron con las fuerzas leales al coronel y lograron controlar el 80 % de Trípoli. Así se preparan para el asedio final sobre el búnker de Khadafy, ubicado al sur de la ciudad.
En medio del avance rebelde sobre el centro de comando del régimen, Saif al Islam, uno de los hijos de Khadafy, reapareció anoche en el hotel Rixos y aseguró que Trípoli "está bajo control". Además de desmentir su detención como había informado la Corte Penal Internacional, Saif al Islam advirtió que su padre aún se encuentra en la capital de Libia y minimizó el asedio de las fuerzas insurgentes.
"Estamos aquí. Este es nuestro país. Esta es nuestra gente, y aquí vivimos, y aquí morimos. Y vamos a ganar porque la gente está con nosotros. Por eso vamos a ganar. "¡Míralos, míralos, en las calles, en todas partes!'', exclamó Saif al Islam, desafiante ante las cámaras.
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