Exactamente siete años después de que el huracán Katrina y el desplome de los diques desataron una vorágine de devastación en la costa del Golfo de México, el huracán Isaac trajo consigo su propio método de destrucción, empapando la costa no de un solo golpe sino mediante incesantes aguaceros.
Fuente. DIARIO EL NUEVO HERALD DE MIAMI
No hay comentarios.:
Publicar un comentario