El mandatario fue consultado por los canales 4, 10 y 12 sobre la decisión. Consideró que “la presión de hecho” que ejercía la opinión pública y la “masa frenteamplista” era “una carga de responsabilidad”. Aclaró que en su momento Mujica habló con él “y aunque la amenaza de complicarle la vida, porque eso es inevitable, de todas maneras, él sabe que la fuerza política y los compañeros consideran que lo precisan y sabía que al final, si la biología se lo permitía, él iba a tomar la decisión de acompañarnos”.
Confesó que se sentía “francamente feliz por varias cosas: por la fuerza política, por el proyecto, pero fundamentalmente por el país porque damos una imagen de seguridad, de estabilidad y no de locas pasiones y de aventuras, nada de jugar a la quiniela”. Dijo que ve en la figura de Tabaré Vázquez a “un hombre cauto y prudente, comprometido con una política de cambios que implica mucha sensibilidad”, pero aclaró que “en la viña del señor hay muchas opiniones y al entrar en la campaña electoral se le irá a poner la fogata necesaria, pero creo que en definitiva ganamos todos”.
“No acompaño esa visión de que en la campaña electoral se deja de gobernar”, comentó.
“Es muy bueno que lo que se hace en un gobierno tenga continuidad, y eso lo asegura el compañero Vázquez”, sentenció.
Consideró que la decisión a favor de la candidatura “se veía venir (…) se lo dijo hoy a los compañeros de varias de las más importantes fuerzas políticas del Frente Amplio aunque no estaban todas. Es un reconocimiento y respeto a la orgánica y me complazco mucho en esto”, subrayó.
La vice
El Presidente también fue consultado por los canales privados sobre si ya tenía opinión formada sobre la figura que ahora debería acompañar al candidato Tabaré Vázquez en la estructura de la fórmula electoral.
Mujica aclaró que no le correspondía a él hacer comentarios al respecto, sin embargo evaluó que “por tradición y por lo que manda la Constitución, a la vicepresidencia se le asigna el papel de influir, monitorear, conducir nada más ni nada menos que la vida parlamentaria que, en una democracia es, al fin y al cabo, la cosa más representativa que pueda existir”.
Agregó que “los compañeros lo elegirán y tomarán el sendero pero me inclinaría con una única recomendación: tener capacidad de diálogo con el mundo parlamentario”, algo que entiende “no es sencillo” porque “se puede tener capacidad de diálogo para adentro pero no necesariamente para afuera y creo que es muy importante que también se tenga para afuera. Dialogar con los más difíciles, con los que más discrepan, con la oposición porque en una democracia hay que intentar negociar siempre. Esa es la posta y ese es un gran oficio que debe tener quien esté al frente en el Parlamento”, aclarando que “se verá si es hombre o mujer, no me puedo aventurar tanto”.
Apoyo a Bonomi
Mujica respaldó a su ministro del Interior Eduardo Bonomi, ante la andanada de críticas que sobrevinieron desde la oposición tras los últimos hechos delictivos.
“Para nada, yo lo remacho (en el cargo)”, dijo ante la pregunta de si consideraba los reclamos de removerlo del cargo ministerial.
“Me duele mucho que se la agarren con un ministro –confesó- como si el ministro inventara las cosas. Me duele muchísimo, porque lo más cómodo para un ministro es conciliar con la corrupción, hacerse el distraído, mirar para otro lado. Hay un ministro que pone la carne en la parrilla y se multiplican los enemigos. Eso es evidente. En lugar de apoyarlo le dan palo”.
Claves
“Tabaré Vázquez es un hombre cauto y prudente, comprometido con una política de cambios que implica mucha sensibilidad”.
“Se veía venir la decisión, lo presionaron por todas partes, le hacían guardia cuando iba a trabajar, que pim, pum, pam, y todo tiene su límite”.
“Es muy bueno que lo que se hace en un gobierno tenga continuidad, y eso lo asegura el compañero Vázquez”.
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