El Gobierno de Bolivia luego de una reunión con todo el gabinete ministerial, Presidido por Evo Morales afirmó hoy que respetará el referendo celebrado en el 2004 que aprobó la estrategia "gas por mar" para negociar con Chile una salida al Pacífico, luego de recibir numerosas críticas de aliados y opositores por anunciar el abandono de esa fórmula. Básicamente, las presiones de organizaciones sociales, las mismas que derribaron del poder a Gonzalo Sánchez de Lozada, reencauzaron la política de "gas por mar" fijada en la fugaz Presidencia de Carlos Mesa.
"Nuestro gobierno mantiene y también preserva lo logrado en el referendo del año 2004", y "respeta la decisión mayoritaria del pueblo boliviano respecto a la política marítima", declaró el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, en rueda de prensa. El asunto fue analizado hoy por el Presidente boliviano, Evo Morales, y sus ministros, a raíz de protestas de sectores sociales, sindicatos y parlamentarios oficialistas y opositores. La inmediata reacción del gobierno de Evo Morales, ocurre cuando hay un clima de agitación social, huelgas y protestas, y por eso para evitar un chispazo que incendiera más los ánimos se corrigió al Ministro de Relaciones Exteriores.
La reacción del Gobierno se produjo después de que el canciller, David Choquehuanca, anunciase el abandono de la fórmula "gas por mar" porque Chile la considera un "chantaje", algo que fue elogiado ayer por la Presidenta chilena, Michelle Bachelet.
"Nuestro gobierno mantiene y también preserva lo logrado en el referendo del año 2004", y "respeta la decisión mayoritaria del pueblo boliviano respecto a la política marítima", declaró el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, en rueda de prensa. El asunto fue analizado hoy por el Presidente boliviano, Evo Morales, y sus ministros, a raíz de protestas de sectores sociales, sindicatos y parlamentarios oficialistas y opositores. La inmediata reacción del gobierno de Evo Morales, ocurre cuando hay un clima de agitación social, huelgas y protestas, y por eso para evitar un chispazo que incendiera más los ánimos se corrigió al Ministro de Relaciones Exteriores.
La reacción del Gobierno se produjo después de que el canciller, David Choquehuanca, anunciase el abandono de la fórmula "gas por mar" porque Chile la considera un "chantaje", algo que fue elogiado ayer por la Presidenta chilena, Michelle Bachelet.
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