"En este momento, para mí es mucho más importante estar en Pekín que en Nueva York." Con estas palabras, el presidente venezolano, Hugo Chávez, que ayer emprendió una gira de tres días por China, justificó su ausencia, una de las más notorias, en la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU). Procedente de Cuba, donde en un plazo de cinco horas se reunió con Raúl y Fidel Castro, del que dijo que "está fuerte", Chávez explicó a su llegada al aeropuerto de Pekín que Venezuela y China están "pensando en serio en la creación de un nuevo mundo".
La visita de Chávez está destinada a fortalecer la cooperación venezolana, en particular la petrolífera, con el gigante asiático. Sólo el 4% de las importaciones chinas de crudo procede de Venezuela, algo que Caracas quiere enmendar para poder reorientar parte de sus exportaciones a Estados Unidos, país con el que atraviesa una de sus peores crisis diplomáticas.
"Este gran país necesita mucho petróleo, mucha energía", afirmó Chávez, antes de subrayar que uno de los "veintitantos" convenios que se firmarán durante la visita será la construcción de sendas refinerías en China y Venezuela para procesar el pesado crudo venezolano. Incluso, dijo, están "trabajando un proyecto de construcción de una flota petrolera conjunta chino-venezolana".
"Venezuela tiene la mayor reserva de petróleo de este planeta. Hace diez años no le vendía ni una gota de petróleo a China. Hoy le vende 300.000 barriles diarios. Vamos para 500.000 el próximo año y para un millón dentro de cuatro", dijo.
Además de los convenios petrolíferos, Chávez recordó que en China analizará la compra de aviones de combate y entrenamiento, y firmará un aumento de 2000 a 3000 millones de dólares del fondo estratégico bilateral, que es ahora de 6000 millones de dólares.
Después de China, Chávez viajará a Rusia, Francia y Portugal. "Con [Dimitri] Medvedev, [Vladimir] Putin, nosotros modestamente estamos construyendo un mundo pluripolar. Será la única manera de lograr lo que decía Simón Bolívar: el equilibrio del universo para tener paz en esta tierra", dijo el mandatario.
Sobre las recientes menciones a su persona en la campaña electoral norteamericana, optó por la cautela. "No hablo con candidatos. Los candidatos andan buscando votos. No tenemos nada contra Estados Unidos como pueblo. Yo no soy antiestadounidense, soy antiimperialista, y yo creo que toda persona sensata en este planeta debería ser antiimperialista", opinó Chávez.
Agencias EFE, AFP y AP para el diario La Nación de Buenos Aires
La visita de Chávez está destinada a fortalecer la cooperación venezolana, en particular la petrolífera, con el gigante asiático. Sólo el 4% de las importaciones chinas de crudo procede de Venezuela, algo que Caracas quiere enmendar para poder reorientar parte de sus exportaciones a Estados Unidos, país con el que atraviesa una de sus peores crisis diplomáticas.
"Este gran país necesita mucho petróleo, mucha energía", afirmó Chávez, antes de subrayar que uno de los "veintitantos" convenios que se firmarán durante la visita será la construcción de sendas refinerías en China y Venezuela para procesar el pesado crudo venezolano. Incluso, dijo, están "trabajando un proyecto de construcción de una flota petrolera conjunta chino-venezolana".
"Venezuela tiene la mayor reserva de petróleo de este planeta. Hace diez años no le vendía ni una gota de petróleo a China. Hoy le vende 300.000 barriles diarios. Vamos para 500.000 el próximo año y para un millón dentro de cuatro", dijo.
Además de los convenios petrolíferos, Chávez recordó que en China analizará la compra de aviones de combate y entrenamiento, y firmará un aumento de 2000 a 3000 millones de dólares del fondo estratégico bilateral, que es ahora de 6000 millones de dólares.
Después de China, Chávez viajará a Rusia, Francia y Portugal. "Con [Dimitri] Medvedev, [Vladimir] Putin, nosotros modestamente estamos construyendo un mundo pluripolar. Será la única manera de lograr lo que decía Simón Bolívar: el equilibrio del universo para tener paz en esta tierra", dijo el mandatario.
Sobre las recientes menciones a su persona en la campaña electoral norteamericana, optó por la cautela. "No hablo con candidatos. Los candidatos andan buscando votos. No tenemos nada contra Estados Unidos como pueblo. Yo no soy antiestadounidense, soy antiimperialista, y yo creo que toda persona sensata en este planeta debería ser antiimperialista", opinó Chávez.
Agencias EFE, AFP y AP para el diario La Nación de Buenos Aires
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