viernes, septiembre 26, 2008

El acuerdo entre Evo y la media luna se traba por la Constitución Política del Estado

La esperada firma de un acuerdo en el diálogo nacional fracasó ayer, tras la exigencia de los prefectos para que la revisión del proyecto de texto constitucional se extienda a otros puntos, más allá de la autonomía. El Gobierno y los prefectos decidieron declarar un cuarto intermedio hasta el lunes, tras haber informado que no lograron acuerdos. A la cabeza del presidente Evo Morales, ambas partes retomaron la mesa central del diálogo con anuncios optimistas. “Esperemos que prime la seriedad de los planteamientos... y se pueda firmar un documento que le dé certidumbre a los bolivianos”, dijo al ingresar el vicepresidente Álvaro García Linera.

Después de dos horas el acuerdo no llegó y, contrariamente, los prefectos y los voceros del Gobierno salieron del lugar del encuentro (la Casa Campestre, en Cochabamba) para informar que, debido a las discrepancias persistentes, el diálogo continuaría hasta el lunes, cuando las mesas sobre el IDH y las autonomías deberán presentar sus informes.

“No se ha logrado resolver todo...hay temáticas pendientes...el trabajo concluirá la próxima semana”, anunció el ministro de Desarrollo Rural, Carlos Romero. Aunque Romero aseguró que el cuarto intermedio se debió a discrepancias en las mesas técnicas, fuentes del Gobierno revelaron que el motivo central fue la sugerencia de los prefectos para que se revisen otros artículos del proyecto de nuevo texto constitucional, pedido que posteriormente confirmó el propio prefecto de Tarija, Mario Cossío. “Las autonomías son muy importantes, pero también, o más, es importante el país; por ello, el tema de la Constitución Política es un tema medular que hace a la vida institucional nacional y nosotros obviamente que no lo dejaremos de lado”, señaló.

Poco antes, García Linera dijo que los prefectos actúan con “poca seriedad” al cambiar sus demandas y salirse de la agenda definida para el diálogo político. “Primero se habló del IDH, luego hemos pasado al tema de las autonomías y ahora aparece otro capítulo de justicia y luego el tema del modelo económico, el tema de Estado (...) Estoy sintiendo que esto es una chacota, una exageración y abuso político pensar que toda la Constitución que fue elaborada por más de 168 constituyentes tenga que ser modificada por el interés o el capricho de fuerzas políticas regionales”, dijo

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