El Mandatario cubano estuvo presente como invitado en la reunión del Mercosur, y la isla ingresó al Grupo de Río. No muy amigo de los viajes al extranjero, Raúl Castro hizo ayer una concesión y dijo presente en Brasil, para participar en su primera cumbre regional como Presidente de Cuba. En realidad, es una serie de encuentros que se celebran en Costa do Sauípe, 80 km al norte de Salvador de Bahía, noreste de Brasil que reúne a los mandatarios y representantes de los 33 países latinoamericanos y caribeños. De acuerdo a su membresía, iniciaron las cumbres del Mercosur, Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Grupo de Río (al que ingresa Cuba) y la Primera Conferencia América Latina y el Caribe.
Vistiendo una guayabera blanca, el hermano menor de Fidel Castro asistió como invitado a la inauguración de la reunión del Mercosur, donde criticó el orden económico internacional, al que calificó como un obstáculo para la integración de América Latina, informó AFP.
Castro recibió entre aplausos la bienvenida del anfitrión, Luiz Inácio Lula da Silvia, quien destacó la importancia de su presencia. "Espero que sea la primera de una serie de reuniones en la que esté con nosotros", dijo.
Al tomar la palabra, Raúl Castro transmitió a los mandatarios un saludo de su hermano, a quien sucedió en el poder hace dos años y medio, y abogó por la integración de América Latina para enfrentar la crisis financiera internacional, aunque advirtió de los obstáculos.
"Sabemos que el propósito recaba esfuerzos, tiene en el camino obstáculos nada despreciables, entre los que destacan los efectos de un orden económico internacional injusto y egoísta que favorece a los países desarrollados y los intereses de las grandes corporaciones transnacionales", subrayó.
Raúl Castro, quien llegó a Brasil tras una visita de dos días a Venezuela, su primer viaje al exterior desde que en febrero pasado asumió oficialmente como Presidente, destacó que la cumbre "ofrece una oportunidad de plantearnos amplios propósitos con una dimensión propia, acorde con nuestras preocupaciones e intereses comunes".
La presencia de Cuba en la cumbre reviste de gran simbolismo, porque se incluyó oficialmente a la isla, excluida en 1961 de la Organización de Estados Americanos (OEA), como miembro pleno del Grupo de Río, instancia de consultas políticas estrictamente latinoamericana, en una breve sesión la tarde de ayer.
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Vistiendo una guayabera blanca, el hermano menor de Fidel Castro asistió como invitado a la inauguración de la reunión del Mercosur, donde criticó el orden económico internacional, al que calificó como un obstáculo para la integración de América Latina, informó AFP.
Castro recibió entre aplausos la bienvenida del anfitrión, Luiz Inácio Lula da Silvia, quien destacó la importancia de su presencia. "Espero que sea la primera de una serie de reuniones en la que esté con nosotros", dijo.
Al tomar la palabra, Raúl Castro transmitió a los mandatarios un saludo de su hermano, a quien sucedió en el poder hace dos años y medio, y abogó por la integración de América Latina para enfrentar la crisis financiera internacional, aunque advirtió de los obstáculos.
"Sabemos que el propósito recaba esfuerzos, tiene en el camino obstáculos nada despreciables, entre los que destacan los efectos de un orden económico internacional injusto y egoísta que favorece a los países desarrollados y los intereses de las grandes corporaciones transnacionales", subrayó.
Raúl Castro, quien llegó a Brasil tras una visita de dos días a Venezuela, su primer viaje al exterior desde que en febrero pasado asumió oficialmente como Presidente, destacó que la cumbre "ofrece una oportunidad de plantearnos amplios propósitos con una dimensión propia, acorde con nuestras preocupaciones e intereses comunes".
La presencia de Cuba en la cumbre reviste de gran simbolismo, porque se incluyó oficialmente a la isla, excluida en 1961 de la Organización de Estados Americanos (OEA), como miembro pleno del Grupo de Río, instancia de consultas políticas estrictamente latinoamericana, en una breve sesión la tarde de ayer.
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