La cultura política del "caudillo", un fuerte financiamiento para el desarrollo de la campaña proselitista electoral, el pago de bonos a la población y el voto consigna, caracterizaron el triunfo de Evo Morales en las elecciones presidenciales.
Según la analista Jimena Costa, “la utilización de recursos millonarios para financiar la campaña mediática proselitista del MAS en las elecciones trajo una votación significativa, a tal punto que provocó la desaparición de cuatro partidos, MUSPA, BSD, Gente y PULSO, que no existieron en términos de resultados", dijo.
"Creo que tiene mucho que ver con el estilo de las campañas, La cantidad de recursos dispuestos para campañas. El Gobierno ha hecho un despliegue económico impresionante y obtuvo resultados y aquellos que no consiguieron recursos para hacer campaña a nivel de medios de comunicación, prácticamente no existen, más allá de las observaciones especificas o de algunas irregularidades", enfatizó. Según su criterio, no queda claro que los bolivianos crean en las instituciones o en las elecciones democráticas, pero queda claro que cada vez se hace más importante, en este tipo de proceso, el rol de los medios de comunicación.
Aseguró que se ha sustituido el contacto directo, el tema de los programas ideológicos, por campañas de marketing “en las que los electores votan más siguiendo consignas, sin que realmente se conozca qué se hará en los próximos cinco años en el país", acotó.
Distanciamiento
En el marco de la votación que favoreció a que Morales sea presidente, la experta considera que hubo un distanciamiento entre la clase media y el MAS, pero este voto se ha multiplicado en la áreas rurales, entre la población indígena y laderas en las ciudades. Agregó que todo esto tiene una explicación en cultura política, es fuertemente rentista, estatista y "caudillista" y Evo Morales ha respondido a ésta.
En su criterio, más que un presidente, el reelecto mandatario es un caudillo, y además se ha construido un mito alrededor suyo “que viene a salvar a un pueblo que se siente victimizado por 500 años”.
Siga leyendo el artículo del DIARIO de La Paz, Bolivia
Según la analista Jimena Costa, “la utilización de recursos millonarios para financiar la campaña mediática proselitista del MAS en las elecciones trajo una votación significativa, a tal punto que provocó la desaparición de cuatro partidos, MUSPA, BSD, Gente y PULSO, que no existieron en términos de resultados", dijo.
"Creo que tiene mucho que ver con el estilo de las campañas, La cantidad de recursos dispuestos para campañas. El Gobierno ha hecho un despliegue económico impresionante y obtuvo resultados y aquellos que no consiguieron recursos para hacer campaña a nivel de medios de comunicación, prácticamente no existen, más allá de las observaciones especificas o de algunas irregularidades", enfatizó. Según su criterio, no queda claro que los bolivianos crean en las instituciones o en las elecciones democráticas, pero queda claro que cada vez se hace más importante, en este tipo de proceso, el rol de los medios de comunicación.
Aseguró que se ha sustituido el contacto directo, el tema de los programas ideológicos, por campañas de marketing “en las que los electores votan más siguiendo consignas, sin que realmente se conozca qué se hará en los próximos cinco años en el país", acotó.
Distanciamiento
En el marco de la votación que favoreció a que Morales sea presidente, la experta considera que hubo un distanciamiento entre la clase media y el MAS, pero este voto se ha multiplicado en la áreas rurales, entre la población indígena y laderas en las ciudades. Agregó que todo esto tiene una explicación en cultura política, es fuertemente rentista, estatista y "caudillista" y Evo Morales ha respondido a ésta.
En su criterio, más que un presidente, el reelecto mandatario es un caudillo, y además se ha construido un mito alrededor suyo “que viene a salvar a un pueblo que se siente victimizado por 500 años”.
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