El PP ha confirmado su abstención, esta tarde, en el debate para la convalidación del decreto ley de la reforma laboral. Será su portavoz, Soraya Sáenz de Santamaría, quien defienda una posición que estaba decidida desde hacía una semana, pero que el PP ha dejado "abierta" hasta el "último minuto", a la espera de una llamada del Gobierno.
La llamada, ciertamente, se produjo, pero sólo a las 23.00 horas de esta pasada noche, y con el único objeto de conocer de primera mano el sentido del voto del Grupo Popular, y sin propósito alguno de abrir siquiera un cauce de negociación sobre el proyecto de ley.
Así lo ha trasladado en rueda de prensa la propia portavoz: "El ministro Corbacho llamó anoche a Cristóbal Montoro", el coordinador económico del PP, con quien ha mantenido dos reuniones de trabajo, "para interesarse exclusivamente por el sentido del voto".
En realidad, y pese al guiño lanzado el lunes al Gobierno, el PP nunca había contemplado en serio apoyar con un 'sí' explícito el decreto del Gobierno. Según las fuentes consultadas en el núcleo duro de Génova, sólo el 'no' había representado una tentación política, en el seno del equipo económico. Sobre todo, vista la rentabilidad política y sociológica que el PP extrajo de su oposición de última hora al 'decretazo' del ajuste.
No obstante, el comité de dirección del lunes se pronunció unánimemente por la abstención, para no obstaculizar una reforma por la que el partido, la Unión Europea y los empresarios vienen reclamando y con cuyas enmiendas -prosperen o no-, el PP pretende constituir un auténtico programa alternativo de Gobierno en materia laboral.
En palabras de la propia Sáenz de Santamaría: "Nos abstendremos porque queremos presentar enmiendas, porque creemos que otra reforma laboral es posible". "¿Es necesaria la reforma laboral? Sí, ¿Es ésta la reforma laboral que necesita España? No, ¿Necesita España una reforma laboral que cree empleo? Sí, ¿Sirve esta reforma para ello? No".
Con este discurso pedagógico ha adelantado la portavoz 'popular' sus argumentos en el debate de esta tarde. "El PP no va a apoyar la reforma laboral del Gobierno, pero sí quiere un debate serio y profundo en la Cámara" para, sólo en la medida de lo posible, "transformarla".
Según ha dicho Sáenz de Santamaría el PP "quiere una reforma global, completa seria y meditada". Además, ha señalado que es partidario de que la tramitación debe hacerse "sin prisa, pero sin pausa".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario