martes, agosto 09, 2011

Rabia en Londres

El Gobierno de Cameron tarda en reaccionar ante los excesos de una violencia social y racial. Londres vive desde la noche del pasado sábado una de las más graves explosiones de violencia callejera que ha conocido la ciudad. El origen de los disturbios fue la muerte de un habitante negro del barrio de Tottenham, Mark Duggan, cuando la policía intentaba detenerlo. Lo que comenzó como una protesta pacífica ante la principal comisaría de la zona se convirtió en una explosión de rabia a la vez social y racial. La violencia se ha ido extendiendo a otros barrios e, incluso, a algunas zonas de ciudades como Birmingham o Leeds, aunque la policía investiga si, a diferencia de lo ocurrido en Tottenham, hay instigadores que poco o nada tienen que ver con la reacción a la muerte de Duggan.

A falta de una explicación suficiente de lo sucedido por parte del Gobierno de Cameron, ni siquiera una hipotética conducta discriminatoria y delictiva de la policía en la muerte de Duggan justificaría la quema de autobuses, el asalto a comercios y el pillaje por parte de bandas organizadas de encapuchados. Son los tribunales quienes deben determinar las circunstancias del suceso, depurando en su caso las responsabilidades penales, y el Ejecutivo, por su parte, quien debe evaluar si las condiciones sociales de algunos barrios de Londres, agravadas por los recortes del gasto público, no constituyen un riesgo además de una insoportable injusticia.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

 
Libardo Buitrago / Blog © 2013 | Designed by RA